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«El ambiente ha pasado de festivo absoluto al lamento profundo»

D. MARTÍNEZ

Domingo, 26 de junio 2022, 00:13

En Oslo, la capital de Noruega, todo ha cambiado de un día a otro. «Aquí están muy evolucionados, son 'open mind'. Todos visten como quieren y aman a los demás. La cultura LGTBI forma parte de la sociedad», explica Cristina Maruri, una española que estaba de visita en la capital cuando sucedió el ataque terrorista. «El ambiente ha pasado de festivo absoluto al lamento profundo. La gente está desolada».

«Dolor es lo que se ha masticado en el desayuno», afirma Maruri que, junto al resto de huéspedes del hotel Bondeheimen -a 30 metros del London Pub, lugar del atentado-, ha vislumbrado esta mañana a través del ventanal de hostal la aglomeración de personas en una calle cortada por policías armados y furgones. La curiosidad es lo primero que han sentido; luego, el dolor. La esquina de la calle Rosenkrantz se había llenado de gente que, con lágrimas en la cara, depositaba flores en la vía. No había gritos, solo tristeza interiorizada. «Qué horror, pobres familias...», lamentaban los presentes.

Los autobuses turísticos van escoltados por motos de la Guardia Urbana. A mediodía se ha permitido realizar una manifestación espontánea durante un par de horas para «dejar desahogar» a la ciudadanía. Bajo el eslogan de 'La lucha continúa', «todos los colectivos» han reivindicado la plena igualdad y la libertad, y se han posicionado en «contra de los asesinatos y la barbarie», alega Maruri.

El centro de Oslo, donde se concentra aproximadamente el 80% de la capital, sigue su vida. Las terrazas están llenas, «como si no pasara nada».

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