Los vecinos de Huertas del Río en Archidona recogen más de 2.000 firmas contra la ubicación de la planta solar

La plataforma aseguró que este número de firmas suponen el 45% de todos los votos emitidos en las últimas elecciones municipales en la localidad. «Van a comprometer y a poner en jaque todo el futuro de la Vega de Archidona, y por eso tantas personas han secundado esta campaña, porque todos tenemos claro que convertir esta zona en un gigantesco huerto solar no va a acarrear beneficios a nuestro pueblo», indicaron.

Asimismo, hicieron referencia a las declaraciones de la empresa Watt Development, promotora del proyecto. Estos residentes insistieron en su «malestar» por el «desprecio» de la empresa inversora hacia las circunstancias de los residentes en la zona. «Incluso hasta las casas más alejadas de la instalación hay apenas unos 100 metros, por lo que todo el impacto afecta no sólo a la primera fila de viviendas familiares que está a escasísimos 25 metros, sino a la pedanía al completo, exceptuando el núcleo de Los Tejares, y eso es fácilmente comprobable», apuntaron.

Los vecinos y vecinas de esta plataforma indicaron que «en estas circunstancias todos quieren sumar ganancias: la empresa que solo vela por sus intereses y no por los del pueblo; los propietarios de las tierras, que primero nos vendieron las parcelas a nosotros y urbanizaron esta zona y ahora nos ponen en esta tesitura; e incluso las administraciones que cobrarán tasas y licencias», y aseguraron que los únicos perjudicados por esta «injusticia» son ellos mismos, «y desde luego, el pueblo de Archidona, que va a hipotecar su futuro desarrollo por este proyecto que transforma tierras fértiles en huertos solares y que daña el patrimonio y el potencial turístico del municipio al destrozar un elemento singular y protegido como las vistas de la Vega de Archidona con la Peña de los Enamorados al fondo».

En este sentido, afirmaron que el recurso colectivo que ha presentado esta plataforma contra el proyecto recoge todas estas cuestiones, que van desde los aspectos legales al impacto sobre la salud, además de las afecciones ambientales y la pérdida de valor de las casas de la zona.

Por otra parte, los vecinos criticaron el visto bueno de los permisos por parte de la Junta de Andalucía. «Es lo más sangrante, cuando dos de las parcelas están protegidas como Paisaje Agrario de Interés Singular».