Esta es Olaf, la primera lechuza de un programa para reintroducir este ave en Alpandeire

«Ya ha crecido lo suficiente y ha comenzado a salir del nido, a volar y a cazar por sí misma insectos como saltamontes y pequeños roedores, aunque todavía precisa de un aporte extra de alimento por parte de los cuidadores», explicaron, al tiempo que añadieron que en las próximas semanas, el programa continuará con la introducción de siete nuevos polluelos de padres nacidos y criados en cautividad.

La alcaldesa de Alpandeire, María Dolores Bullón, manifestó que antiguamente, la lechuza común erá un ave habitual en la zona y que ésta desapareció hace más de 20 años, tiempo en el que no se ha producido avistamientos.

Este proyecto durará cinco años y pretende consolidar una población estable de lechuzas comunes. «Se lleva a cabo a través de la técnica hacking, que consiste en colocar polluelos en nidos artificiales, con una edad a la que el pájaro ya se ha desarrollado identificándose con su especie pero aún no puede volar. Adicionalmente, las crías deben ser capaces de termorregular y de alimentarse por sí mismas. Diariamente se suministra en el nido suficiente cantidad de alimento de forma que los polluelos no se percaten de la presencia humana», explicaron y continuaron: «Las pequeñas lechuzas quedan fijadas en el entorno donde se ubica el nido como si de su lugar de nacimiento se tratase. Llegado el momento dan su primer vuelo, familiarizándose con el lugar y volviendo al nido para descansar y comer. A medida que van pasando los días se va reduciendo progresivamente el aporte de comida para motivar al animal a cazar por sí mismo hasta que es completamente autosuficiente y no precisa de una aportación adicional de alimento. La ubicación de los nidos no se hace pública para evitar la interacción humana».

Detrás de este proyecto está la asociación RASTREA, el Grupo Micológico Havaral y el colectivo GREFA, con la colaboración con expertos en cetrería, el Ayuntamiento de Alpandeire, Alonso Sánchez y MB Decoración.

Esta iniciativa podría ir más allás, puesto que se está estudiando crear un criadero permanente de lechuzas comunes en el pueblo, con el fin de enviar los polluelos a otras zonas que trabajan en su reintroducción.

Por otro lado, se plantea la posibilidad de establecer en próximas fechas un criadero permanente de lechuzas comunes en Alpandeire, desde donde los polluelos serán enviados a diferentes puntos de Andalucía para convertirse en protagonistas de otras campañas de reintroducción en la naturaleza.

La desaparición de la lechuza común es habitual, desgraciadamente, en toda España, principalmente por la transformación del medio agrario, la pérdida de biodiversidad del campo, envenenamientos y pérdida de lugares para nidificar. Se trata de un ave rapaz nocturna, que está protegida.