Un británico de Alhaurín de la Torre para dar voz a Ucrania

«Cobré mi nómina y decidí dejar las tierras murcianas para venirme aquí y encontrar la paz», deja claro. Y en esta nueva vida, en la que mezcla sus incursiones en el teatro de operaciones ucraniano con el día a día tranquilo en el municipio del Valle del Guadalhorce, alterna «un trabajo normal de atención al cliente», con una labor a favor de la población civil que sufre las consecuencias del ataque ruso. Este afán de colaborar le ha llevado a dirigir el documental 'Voces del frente', testimonio de su duro recorrido por el «infierno» en el que tienen que sobrevivir los habitantes de las regiones de Kharkiv, Kherson, Donetsk y Zaporizhzhia. Lugares de Ucrania bajo constante bombardeos y con privaciones de todo tipo. Su objetivo es que la proyección de su trabajo le permita recaudar, al menos, 15.000 euros, destinados a la organización solidaria 'For a Peaceful Sky' (por un cielo en paz).

Para el estreno de este audiovisual eligió el Centro Cultural Vicente Aleixandre, en el municipio alhaurino, con lleno; la cinta recorrerá otros puntos de España, en busca de donaciones.

Y ¿por qué la guerra en Ucrania y no otra? «Es una amenaza directa para los países europeos. Putin es un nostálgico de la antigua URSS y quiere recuperar su territorio. Los ucranianos, que dicen que el conflicto no terminará hasta que el último ruso no salga de su país, nos están defendiendo a todos de un enemigo que es común», responde, no obstante, convencido de que Rusia será derrotada, aunque no a corto plazo.

Mientras llega ese día, él está dispuesto a poner todo de su parte para ayudar a los que sufren la brutal ofensiva y ya anuncia que regresará a territorio ucraniano.

No es la primera vez que Jay J. C. Buckley se atreve a ser portavoz de aquellos que necesitan un altavoz. En su libro, 'Banderas en llamas', denuncia el acoso que, en pleno siglo XXI, sufren personas por su orientación sexual.