Tamara Falcó, estrella de la Semana de la Moda

Amigo de Ágatha desde la época de la Movida, en la década de los 80, se deshizo en halagos hacia ella. «Me encanta el hecho de no haberse nunca traicionado, de tener una personalidad increíble y haber sido absolutamente fiel a esa personalidad siempre, que en el mundo en el que vivimos es muy complicado. Yo la respeto muchísimo», añadió antes de bromear con el «gris vergonzoso» que predominaba en su estilismo en un evento en que el derroche de color es una máxima.

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Sentado en primera fila, Banderas estuvo flanqueado por su novia, Nicole Kimpel, y la pareja de Ágatha, José Manuel Díaz Patón. Precisamente fue el abogado el que acaparó todos los focos pese a la presencia de uno de nuestros actores más internacionales. El letrado, abogando para que el desfile de su pareja fuese perfecto, acudió raudo y veloz al centro de la pasarela para recoger una plantilla que se salió del incómodo zapato de una modelo. Lo mismo defiende a su amada de los desplantes de Carmen Lomana asegurando que la socialité sufre un «ataque de cuernos» que cuida de los detalles del espectáculo de Ágatha para que todo salga a pedir de boca.

El bonito gesto del abogado quedó eclipsado cuando Jedet hizo acto de presencia en el desfile de Andrés Sardá. La firma de lencería presentaba la colección 'Avalancha' y allí estaba la actriz para recuperar la normalidad de su día a día tras denunciar abusos sexuales por parte de un productor en la fiesta posterior a los premios Feroz. La protagonista de 'Veneno' respondió a todos los medios de comunicación con amabilidad para agradecer el trato recibido tras el lamentable suceso mientras espera con ansia el juicio para «que se haga justicia». Envuelta en un 'look' de estampado de leopardo y sin retirarse unas enormes gafas negras mientras daba unas caladas a un vapeador, Jedet se hizo un hueco en primera fila para disfrutar de un 'show' de lencería inspirado en el glamour de una fiesta en la nieve cubierta por pieles falsas. La protagonista del festejo era la 'influencer' Dulceida, que supera con creces los tres millones de seguidores en Instagram.

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Del glamour de la montaña se pasó al lujo del desierto. Si hay un lugar donde alcanza su máxima expresión es en el palacio de la Mamounia, en Marrakech, del que trajo un pedacito a la pasarela Jorge Vázquez para celebrar las dos décadas que lleva vistiendo con la máxima calidad y exquisitez a lo más granado de la sociedad española. Desde Sassa de Osma, esposa de Christian de Hannover, a Eugenia Martínez de Irujo, pasando por Isabel Preysler. Precisamente fue su hija Tamara la que revolucionó la pasarela. La marquesa de Griñón llegaba de la mano con su futuro marido, Iñigo Onieva, para presentar algunas de las piezas de su colaboración con la firma Pedro del Hierro. Por primera vez tras darse una segunda oportunidad, la pareja posaba ante la prensa. Tal era el revuelo en torno a ellos que grandes actores como Luis Tosar, Emma Suárez o Javier Cámara tuvieron que esperar pacientemente durante una media hora para pasar por el 'photocall'.

Falcó no sólo presumía de amor y de colección, también de ser la musa del diseñador Juan Avellaneda. Su confidente y estilista exponía una nueva línea de gafas con MÓ de Multiópticas llamada 'front row' (primera fila) con una pieza inspirada en la marquesa. «Siempre me inspiro en mis amigas. Hay una gafa que hice pensando mucho en un gif -cuenta entre risas- que nos enviamos Tamara y yo siempre por WhatsApp en la que salen dos personas con gafas, y dije ¡Ay! voy a hacer unas similares pero ponibles y con rollo». Es el momento de Tamara y ella lo sabe.