Elías Bendodo: «Pedro Sánchez ha parado el motor de Málaga y el PP lo va a arrancar»

–Lleva muchos años en política, pero es la primera vez que encabeza una lista electoral. ¿Cuáles son sus sensaciones?

–No son muy diferentes porque antes, cuando durante catorce años fui presidente provincial del partido, me sentía igual de responsable de los resultados aunque técnicamente no encabezara una candidatura. Y es que al final a mí me medían como presidente provincial por los resultados en la capital, en Marbella, en la Diputación... aunque no encabezaba la lista. En esta caso el plus de responsabilidad radica en el hecho de encabezar la lista de una circunscripción muy importante como es Málaga, donde se eligen 11 diputados y 4 senadores y donde el PP es un partido fuerte y valorado por los malagueños.

–¿Cómo vive esa dualidad de cabeza de lista por Málaga y coordinador de la campaña del PP a nivel nacional?

–Viviendo en el avión. He cambiado el AVE por el avión. Primero porque es más barato y segundo porque tarda menos. Y es que el AVE de Madrid a Málaga desde que Gobierna Sánchez tarda tres horas y eso son muchas horas. En esta campaña estoy entre Málaga y Madrid, también en algún otro territorio, pero principalmente muy volcado en Málaga.

–En estas elecciones, ¿se la juega por partida doble?

–Ya coordiné la campaña de las municipales y no nos fue mal.

–En esta campaña el PSOE de Málaga le ha puesto en el punto de mira de los ataques. Incluso Juan Espadas en su última visita a Málaga le criticó y le acusó de mentir ¿qué le parece?

–Juan Espadas tiene ya la credibilidad bajo el suelo. Juan Espadas, no me cuesta decirlo, fue un buen alcalde de Sevilla, un mal candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía y un peor secretario general del PSOE de Andalucía. No ha aclarado todavía el caso de su número dos con el lío del secuestro en Maracena, está obteniendo resultados pésimos en las autonómicas y en las municipales y ha sido el responsable de que el PSOE haya perdido poder municipal. El PSOE ahora ya no es el de antes y el PP es el que gana las elecciones en Andalucía. Por tanto, esto va de meter más goles y no de dar más patadas. Esas salidas de tono, de insultos hacia mí, creo que son fruto del nerviosismo. Entiendo que estén nerviosos porque el PSOE en Andalucía es una caricatura de lo que era antes.

–¿Qué papel tiene que jugar Málaga en estas elecciones?

–Málaga fue protagonista activo del cambio en Andalucía y mi objetivo es que Málaga sea protagonista decisivo del cambio de España. Desde Málaga se trabajó hacia el cambio en Andalucía después de 40 años de socialismo, y ahora en Málaga el PP tiene que sacar un gran resultado para que Feijóo lidere el cambio en España.

–¿Ve factible repetir el resultado de 2011 en la provincia, que fue el mejor que obtuvo el PP en unas elecciones generales al lograr 6 diputados y tres senadores?

–Eran otras circunstancias. En 2011 había un movimiento social contrario a las políticas de Zapatero que es muy parecido a lo que le pasa hoy a Sánchez. Pero es cierto que hoy día hay otros actores políticos y, por tanto, lo veo difícil. Mi objetivos es ganar las elecciones en Málaga pero no me atrevería a dar una cifra.

–¿Cuáles son los proyectos que de forma prioritaria impulsaría un Gobierno del PP en Málaga?

–Sueño con una foto de cuatro personas en La Moncloa: el presidente Feijóo junto a Juanma Moreno recibiendo al alcalde de Málaga y al presidente de la Diputación para hablar de los proyectos de Málaga. El Gobierno de Sánchez no ha hecho nada por Málaga y lo que dejó planificado el último Gobierno de Mariano Rajoy lo ha paralizado. Ahí están los ejemplos del acceso norte al aeropuerto, cuyas obras estaban adjudicadas y el PSOE rompió el contrato de forma inexplicable, o la prolongación del tren hacia Marbella y Estepona, donde desde el Ministerio de Fomento que dirigía Íñigo de la Serna se dejaron hechos unos bocetos y Sánchez los metió en un cajón. Sánchez lo que ha hecho únicamente es paralizar los proyectos que el PP tenía en marcha. Es más, además de los proyectos paralizados en una cuestión como la seguridad hoy en Málaga hay 400 policías nacionales menos que cuando Sánchez llegó al Gobierno. Sánchez ha venido a Málaga en el Falcon un par de veces a dar un mitin en campaña y nada más. Ni él ni sus diputados han hecho absolutamente nada, ni sus ministros han aparecido por aquí. El motor de Málaga lo ha parado Pedro Sánchez durante cinco años y el PP lo va a arrancar y lo va a poner a funcionar a tope.

–Sobre el tren litoral. Si Feijóo gobierna, ¿la próxima legislatura será en la que veamos pasos para que ese tren sea una realidad?

–Es un proyecto complejo y costoso pero necesario a medio y largo plazo. El proyecto de tren litoral evidentemente tiene que volver a coger velocidad porque no puede seguir metido en el cajón.

–El programa del PP para Málaga, ¿qué plantea en materia de infraestructuras hídricas?

–El tema del agua es la máxima prioridad que puede tener cualquier gobierno ahora mismo. Málaga necesita un pacto por el agua que se haga en toda España. Un plan nacional sobre el agua, donde las cuencas más deficitarias, como la nuestra, se vean beneficiadas. Eso debe ser cosa de todas las administraciones, pero la única solución que tiene Pedro Sánchez para luchar contra la sequía es mirar al cielo y esperar que llueva. No hace nada, cuando lo más urgente que tiene nuestra provincia son las políticas hidráulicas.

–Hablando del tema del ferrocarril, en esta legislatura ha habido denuncias sobre la reducción de trenes, las averías,... ¿qué va a hacer el PP ante esta situación?

–Eso se llama dejadez por parte de un ministerio como el de Transportes que no está pendiente del día a día y que se pone a hacer obras en la línea del AVE de Madrid a Málaga en verano, en plena temporada alta de visitantes provocando que los trenes tarden más en llegar. ¿El Cercanías? Más bien el averías con retrasos permanentes. Por tanto, necesitamos un Gobierno que mire a Málaga con cariño y no con desdén. Con el Gobierno de Feijóo llegará la hora de Málaga y pondremos en marcha el motor que Sánchez ha parado.

–Desde la izquierda se pone el acento en alertar de un posible pacto del PP con Vox. ¿Usted tendría algún inconveniente en pactar con Vox?

–Quiero dejar claro que el PP aspira en estas elecciones generales a conseguir una mayoría amplia y suficiente que dé tranquilidad al conjunto de los españoles. Si los españoles quieren un cambio, el camino es Feijóo y el PP; no hay atajos, no hay votos de atajo para el cambio. El cambio sólo llegará de la mano del voto directo al Partido Popular. En Andalucía fue posible porque lo viví en primera persona y en España queremos que sea posible. Todas las encuestas dicen que el PP va a ganar las elecciones y el llamamiento que quiero hacer es que queremos que sea presidente del Gobierno en solitario y que forme un gobierno en solitario que dé estabilidad al conjunto de los españoles. Eso es repetir el modelo Juanma Moreno en España.

–Pero si no se diera esa circunstancia, ¿pactarían con Vox?

–Lo mismo se decía en las elecciones autonómicas andaluzas y al final el tiempo nos dio la razón. Esta campaña es una magnífica oportunidad para crecer y trabajar para conseguir esa mayoría amplia.

–¿Qué le diría a ese votante moderado que ve ahora con recelo poder votar al PP porque tenga miedo a un posible pacto con Vox?

–Que no tengan ningún miedo. Estoy convencido de que habrá una ola de votos que van a facilitar un gobierno en solitario del PP el próximo 23 de julio.

–¿Por qué le cuesta tanto a los dirigentes del PP pedir la mayoría absoluta y hablan siempre de mayoría suficiente o amplia?

–Llámelo mayoría absoluta. Lo que queremos es tener los votos suficientes para no depender de nadie. Esos gobiernos funcionan muy bien, ahí está el ejemplo de Andalucía y queremos que en España funcione.

–Elías, ¿se ve de ministro?

–No. Lo dije cuando me vine a Madrid: disfruto más del camino que de la meta. Por tanto, ahora estoy disfrutando en conseguir construir una alternativa de gobierno a Sánchez y un proyecto de partido junto al presidente Feijóo y mis compañeros para que se produzca el vuelco y haya un cambio. Lo que tenga que venir vendrá o no.

–Se lo preguntaba porque ya hay algunos comentarios respecto a que sería bueno que Málaga tuviera un ministro de Turismo y usted conoce el turismo.

–Ya, ya… El presidente es el que decidirá su gobierno. Trae mala suerte hablar de esto. Lo primero es ganar bien las elecciones y después el presidente hará el equipo que mejor convenga a España.

–En las dos últimas elecciones generales hubo repetición al no haber acuerdo, ¿habrá una tercera?

–Los socialistas con sentido común, que siguen siendo socialistas no sanchistas, hablan de que hay que dejar gobernar a la lista más votada. Ese debate debemos abordarlo pronto. Entre las tareas del próximo gobierno, sea el que sea, tendrá que estar que las mayorías no pueden estar sometidas a las minorías. Feijóo lleva diciendo desde que llegó al partido que su intención es que gobierne la lista más votada y se le ofreció al PSOE en las comunidades autónomas y los ayuntamientos, pero no lo aceptó. Avanzar en democracia es que gobierne la lista más votada. Espero que se produzca ahora y que haya un consenso y las modificaciones legales que se deban hacer para que las minorías no se impongan a las mayorías.

-¿Que ha supuesto para la campaña del PP la intervención de Feijóo en su cara a cara televisivo con Sánchez?

–La victoria de Feijóo en el cara a cara en televisión ha sido la más contundente de los siete debates de este tipo que se han producido en democracia. Nunca antes un candidato se había impuesto con tanta claridad. A los que conocemos a Feijóo y trabajamos con él no nos ha sorprendido. Los papeles estuvieron cambiados. El verdadero presidente fue Feijóo, con aplomo, con nervios de acero, con sentido común y el Estado en la cabeza. Sin embargo, Sánchez dio la imagen de un aspirante a la desesperada: nervioso, desarbolado, sin planteamiento de país. El debate le ha dado la puntilla a Sánchez. Por tanto, ahora los ciudadanos tienen que decidir si quieren un gobierno del PP con una mayoría amplia como el de Juanma Moreno en Andalucía o Paco de la Torre en Málaga o un gobierno con intermediarios. El momento es crucial y tenemos que anteponer el bien de este país. El único que puede ganar es Feijóo. Y el único que puede aglutinar una mayoría suficiente para cerrar la herida del sanchismo es Feijóo.

–Si a partir del 23 de julio hay un nuevo Gobierno en La Moncloa, ¿en qué lo van a notar inmediatamente los malagueños?

–Lo primero es que van a tener un presidente del Gobierno que les diga la verdad a los españoles. Tenemos un presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que no ha dicho la verdad a nadie. De lo último que nos hemos enterado, porque lo ha dicho Puigdemont, es que le habían ofrecido el indulto a cambio de estar un tiempecito en la cárcel. Eso es una vergüenza. Más de uno debería dimitir por eso. El Gobierno de Feijóo será un Gobierno que dirá la verdad a los españoles, será transparente, auditará las cuentas públicas y publicará las auditorías, y bajarán los impuestos a las familias más necesitadas. Feijóo tiene un plan para los cien primeros días que va en esa línea de transparencia, reducción de impuestos, de agenda internacional y recuperación del prestigio internacional de nuestro país.

–¿Por qué deben votar los malagueños el 23-J al PP?

–Porque se ha demostrado que a Málaga le va bien con el PP. Desde hace ya muchos años el PP es el partido de Málaga. Málaga nunca le ha fallado al PP y el PP nunca le ha fallado a Málaga.