Las empleadas de hogar que trabajen en varias casas y sean despedidas de una podrán cobrar paro y mantener los otros contratos
El Real Decreto-ley 16/2022, de 6 de septiembre, marcó un punto de inflexión en la equiparación de las condiciones laborales de este colectivo, muy feminizado, con el resto de trabajadores por cuenta ajena
Las personas empleadas en el servicio doméstico (en Málaga, el 97% son mujeres) que actualmente trabajen en varias casas y sean despedidas de alguna de ... ellas podrán compatibilizar el paro (si han generado el derecho a cobrarlo) con los contratos que aún mantenga. Todo ello con matices, porque el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) aclara que el afectado podrá percibir la prestación contributiva por desempleo por el cese en el trabajo, «siempre que la suma de las jornadas de los empleos que mantiene no alcance la duración de una jornada a tiempo completo». De este modo, de la cuantía de la prestación que resulte habrá que restarse la parte proporcional a la jornada de trabajo que realice en los empleos que mantiene.
En 2023, la cuantía mínima de la prestación por desempleo es de 560 euros si no se tienen hijos y de 749 euros al mes, si los hay. La máxima es de 1.225 euros para personas sin hijos, de 1.400 euros para quienes solo tienen uno y de 1.575 euros al mes para quienes tienen dos o más hijos a cargo.
El Real Decreto-ley 16/2022, de 6 de septiembre, marcó un punto de inflexión en la equiparación de las condiciones laborales de este colectivo, muy feminizado, con el resto de trabajadores por cuenta ajena, especialmente en lo referido al despido por desistimiento del empleador, es decir, cualquier extinción laboral de una empleada de hogar deberá recoger ahora la causa en la que se fundamenta y deberá enmarcarse en el Estatuto de los trabajadores.
No obstante, además de las previstas para el resto de trabajadores, la relación laboral de este colectivo podrá extinguirse por causas específicas, como la disminución de los ingresos de la unidad familiar o el aumento de sus gastos por causa sobrevenida; la modificación sustancial de las necesidades de la unidad familiar que justifican poder prescindir de ese trabajador, y la pérdida de confianza de este último, fundamentada «de manera razonable y proporcionada», en el comportamiento del empleado.
Además, en caso de que el contrato haya durado más de un año, el empleador deberá conceder un preaviso, como mínimo, de 20 días desde que se comunique a la persona trabajadora la decisión de extinción. En los demás supuestos el preaviso será de siete días. Durante este período de preaviso, la persona que preste servicios a jornada completa tendrá derecho, sin perder su retribución, a una licencia de seis horas semanales para poder buscar nuevo empleo.
El empleador podrá sustituir el preaviso por una indemnización equivalente a los salarios correspondientes al periodo de preaviso correspondiente.
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En cuanto a la indemnización que deberá recibir la persona que trabaja en el servicio doméstico, además de los conceptos pendientes de pago como salario, horas extraordinarias, días de vacaciones no disfrutados y pagas extras en la parte proporcional al tiempo de trabajo, junto con el importe correspondiente al tiempo de preaviso (si debe abonarse), hay que sumar la indemnización que será de 12 días por año trabajado con el límite de 6 mensualidades si se justifica debidamente que las causas especiales se ajustan a las previstas para esta relación especial o la prevista para los despidos del Estatuto de los Trabajadores.
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