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El Gobierno da otra oportunidad al diálogo social para extender los ERTE

La propuesta de Trabajo no logró el respaldo de los agentes sociales en la reunión de ayer y se emplazaron a seguir negociando

L. PALACIOS / C. VALLEJO

MADRID.

Martes, 16 de junio 2020, 00:02

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El La reunión que mantuvieron ayer por la tarde el Gobierno y los agentes sociales para negociar la extensión de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) terminó sin acuerdo. El Ejecutivo -convocante- llevaba bajo el brazo su propuesta de prorrogarlos solo hasta el próximo 30 de septiembre, rebajando además las exenciones en las cotizaciones sociales.

Así constaba en el documento oficial que ayer les había remitido a los agentes sociales con el objetivo de aprobarlo hoy mismo en el Consejo de Ministros. Pero este último plan terminó decayendo del orden del día de la reunión que hoy se celebra en Moncloa. El Ejecutivo ha optado por no imponer su criterio, tras argumentar que está comprometido con el diálogo social y da prioridad a llegar a un acuerdo con la patronal y los sindicatos para extender los ERTE más allá de este 30 de junio.

PROPUESTA RECHAZADA

  • uTrabajadores Todos tendrán derecho al paro y el tiempo que dure el ERTE no computará para futuras prestaciones.

  • uCotizaciones Las exenciones a las empresas, sin embargo, en las cuotas se reducen entre un 15% y un 60%.

  • uDespidos Se mantiene la prohibición de realizar despidos por fuerza mayor, o bien causas objetivas.

  • uConciliación Los padres trabajadores podrán pedir cambios en sus jornadas laborales.

Si el documento presentado por Trabajo recogía que la duración de estos expedientes «finalizará, en cualquier caso, el 30 de septiembre de 2020», también dejaba la puerta abierta extraoficialmente a una nueva ampliación que podría llegar a final de año. Era algo que los sindicatos estaban dispuestos a aceptar -aunque hubieran preferido una prórroga más larga-, pero no la patronal, que ayer rechazó con contundencia apoyar estas nuevas condiciones que ve «inaceptables», desmarcándose de un posible acuerdo y tras varias semanas de intensas negociaciones.

La CEOE ya había advertido que no toleraría una nueva ampliación que no fuera hasta final de año. Ayer, además, manifestó su malestar por que la propuesta del Gobierno empeorara las exenciones en las cotizaciones sociales y mantuviera la prohibición de despedir a ningún trabajador afectado por un ERTE hasta el 30 de septiembre, salvo casos excepcionales, y de no poder reducir el tiempo del contrato temporal.

Los que sí continuaban, según el documento de Trabajo, eran los beneficios que estos ERTE reportan a los trabajadores afectados. De esta forma. el tiempo que duren no computará para futuras prestaciones, lo que se denomina 'contador a cero', y los trabajadores que no hayan cotizado el periodo suficiente también podrán acceder al desempleo.

Proseguir la negociación

Al término de la fallida reunión, el secretario general de CC OO, Unai Sordo, explicó que no se había alcanzado una posición conjunta entre los agentes sociales y el Gobierno y avanzó que las negociaciones proseguirían a lo largo de esta semana. «Puede asegurarse que se van a prorrogar los ERTE durante los próximos meses, pero todavía está por definir exactamente en qué condiciones, con qué especificidades respecto al último acuerdo al que llegamos». Asimismo, se mostró convencido de que los ERTE van a ser un instrumento fundamental para sostener el empleo durante los próximos meses.

Desde la CEOE coincidían en su intención de continuar negociando y ahora se mantienen a la espera de una propuesta de Trabajo. Si bien aún no hay una nueva fecha cerrada para celebrar la próxima reunión. No hay mucho margen por delante, puesto que el 30 de junio vence el esquema actual de los ERTE. Miles de empresas y más de tres millones de trabajadores dependen de la conclusión de las negociaciones.

En el Real Decreto que el Gobierno buscaba que se aprobara hoy no se hacía distinción entre los ERTE de fuerza mayor total y parcial, como sí sucedía en el anterior. Aunque una empresa mantuviera a todos sus trabajadores en suspensión de empleo no podría beneficiarse de una exención del 100% de las cotizaciones de su plantilla (si tenía menos de 50 empleados), ni tampoco del 75% (en caso de ser de mayor tamaño). A partir del 1 de julio las empresas quedarían exoneradas del abono de un porcentaje variable de la aportación empresarial a la Seguridad Social, pero sería bastante más reducido que ahora.

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