Scariolo reclama ante Alemania: «Hay que rebajar la ansiedad»

«Ofensivamente tenemos que tener paciencia y jugar un partido en el que nuestros deseos ofensivos serán limitados. Tenemos que tener confianza y paciencia sin entrar en esos momentos de ansiedad o precipitación que no nos lleva a nada bueno», insistió el seleccionador nacional, para quien es fundamental, «no dejar demasiada libertad a Schoeder, sin quitar protección al resto de rivales, porque el peligro de Alemania en el tiro puede llegar desde muchos puntos».

«Alemania dispone de muchos jugadores de gran tamaño y capacitados para meter de tres. Se enfrentan dos de los mejores equipos defensivos de la competición y es fácil pensar que se rebajará la anotación. Debemos mantener a Schroeder en un nivel de notación normal, en su media, pero que la defensa sobre él no nos cueste demasiado con faltas, porque desde el tiro libre es casi infalible y no hay que permitirle que pueda poner el ritmo a sus compañeros. Están todos capacitados para meter un tiro a dos puntos y tienen un número muy amplio de jugadores que con tiempo pueden anotar de tres», recordó Scariolo.

El técnico italiano destaca que «con la capacidad de pase y la visión de juego» de los jugadores españoles, «un pase bien dado vale igual o más que una canasta». «Sólo con tener la pelota en una posición peligrosa se crea un peligro en la defensa rival. Si mantenemos la paciencia vamos a encontrar un tiro abierto. Nuestros porcentajes de tiro están siendo buenos», subrayó.

Bastante más preocupado está Scariolo con el futuro de la selección española, después de que desde hace unos años haya cambiado la dinámica y desde hace años se esté trabajando «para reforzar selecciones de otros países, con el ejemplo claro de Eslovenia (el madridista Luka Doncic)». «En España se ha hecho un buen trabajo de los clubes a nivel de cantera y de los entrenadores españoles a la hora de invertir en la producción de jugadores, pero en los últimos años encuentra una tendencia contraria que preocupa de cara al futuro y crea un color menos rosa, porque la inversión va a otros países. Hemos trabajado muy bien y seguimos trabajando bien, pero ahora para otros países. Es una tendencia muy peligrosa que se está ya reflejando en el número de jugadores por los que se apuesta. A nivel de primer equipo tenemos cuerda para un ratito, pero con cierta preocupación», advirtió.