Manuel Alcántara: «Haré lo posible por seguir actuando de testigo»

El presidente de la Fundación Eisenhower Fellowships, el norteamericano George de Lama, entregó el galardón a Manuel Alcántara, que aseguró sentirse «abrumado» por este reconocimiento que reivindica la libertad de prensa, ya que ha confesado sus «dudas» de merecerlo. Fiel a su cita diaria con los lectores en la contraportada de SUR y de los medios regionales de Vocento, el articulista y poeta malagueño aprovechó para repasar su «larga vida que está resultando larga por las dos puntas».

El periodista también se refirió a su geografía personal, tan implicada con su origen y, a la vez, con esa capacidad para compartir su mirada con lectores de cualquier parte. «Mi vida ha transcurrido entre dos ciudades, Málaga, que es mi natura y mi ventura, y Madrid, pero yo soy de todos los sitios en los que he estado», aseguró el poeta y periodista que también advirtió de las imágenes que devuelven los espejos porque, a veces, «engañan».

Rainer Maria Rilke también se asomó al discurso de Alcántara que recordó al poeta alemán y sus versos con un amigo muerto: «Sobreponerse es todo». Una máxima que el malagueño llevó a su prosa poética al contemplar el momento actual desde sus artículos: «Hay que sobreponerse a los malos tiempos y no entristecer a nadie cuando se escribe».

Por ello, abogó por «no perder la esperanza» y confiar que «los tiempos que vengan sean mejores». Aunque en su caso esos espejos de los que antes hablaba, le devuelvan el reflejo con severidad. «Cuando me miro para afeitarme compruebo que tengo cara de antepasado», ironizó Manuel Alcántara que no renunció a su reconocible afilado humor y malabares de palabras. Para reiterar, que vengan los tiempos que vengan, «haré lo posible por seguir actuando de testigo».

El acto de entrega del galardón First Amendment, que se celebró en el transcurso de una comida, también contó con la intervención del presidente de la Fundación Eisenhower Fellowships, George de Lama, que confesó que este reconocimiento a Manuel Alcántara le transportaba a su época de periodista en la redacción del ‘Chicago Tribune’. Y como miembro de la «tribu» felicitó a Alcántara por su capacidad para conectar con los lectores ya que, según dijo, sus artículos persiguen «lo esencial, lo relevante y buscan la luz». «Gracias por tu voz tan clara y por compartirla», concluyó.

Por su parte, el director de medios regionales y revistas de Vocento, Benjamín Lana, aludió a la amplitud de la mirada y de la obra de Alcántara. «A Manuel le siguen brotando las palabras como cuando era un niño en la playa», aseguró el periodista que recordó esos más de 20.000 artículos que llevan su firma y su lectura diaria de la realidad. «Puestos en fila, sus versos y sus columnas bien podrían dar la vuelta al mundo, y sus lectores, cogidos de la mano, podrían coser su amada África con la Península y aún sobrarle para suturar Cataluña», señaló.

Lana añadió que el galardón de la Fundación Eisenhower es un reconocimiento que comparten tanto el grupo Vocento como los lectores de este autor que ha hecho «de la columna el poema diario» y ha conseguido ser «tan universal y tan malagueño al mismo tiempo». «Gracias por no estar triste», concluyó el periodista tomando las palabras que previamente había pronunciado el propio maestro Manuel Alcántara.

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, también intervino para destacar esa costumbre inversa de cientos de lectores de SUR de comenzar la lectura por la última página a la búsqueda del artículo de Alcántara. Unas columnas en las que, según dijo el regidor, los lectores encuentran «análisis reposados, lucidez, dominio del lenguaje, conocimiento de la historia y filosofía».