El grafiti como tabla de salvación

«El proyecto surgió hace varios años porque Hidetwo yo somos amigos desde pequeños. Al fin y al cabo, yo estoy en esta movida por él», habla Lolo Moreno, director de Dolores&Remedios, en alusión a una movida que va del skate al grafiti, del hip hop a todo lo que quepa en la llamada cultura urbana.

«Desde hace años le comentaba mi idea de hacer un documental sobre él y al final todo vino de la mano, porque el curso pasado acababa la carrera de Publicidad y el documental se terminó convirtiendo en mi trabajo de fin de Grado», recuerda Moreno sobre Dolores&Remedios.

El documental cuenta entre sus colaboradores con el CAC Málaga y el establecimiento hotelero Picasso Suites Málaga. Y justo en el interior de este último sitúa el director de Dolores&Remedios una de las obras más notables del grafitero que protagoniza el documental. «Hidetwo estudió Ilustración en la Escuela de Arte de San Telmo, pero en el ámbito del grafiti se ha formado de manera autodidacta. En el hotel, que está muy cerca de la Casa Natal de Picasso, ha realizado un Picasso en el patio interior que ocupa todo el muro y que combina con elementos de paisaje», detalla el realizador del documental.

«Hidetwo empezó en el grafiti realizando letras, se fue metiendo en el paisajismo y ahora va por óleos, acuarelas... En este momento combina las experiencias de ambos ámbitos y así realiza cuadros pintados con spray y muros con influencias de las acuarelas», acota Moreno.

«Lo que creo que diferencia Dolores&Remedios del resto de documentales sobre el grafiti, es que la mayoría de estos audiovisuales ofrecen mucha imagen, pero quizá no terminan de mandar ciertos mensajes para la gente que viene detrás. En este sentido prosigue Lolo Moreno creo que Dolores&Remedios tiene un marcado carácter educativo, incluso, motivacional, porque lanza ese mensaje de animar a la gente a seguir su vocación y de esa manera mostrar una realidad diferente del gratifi».

Una manifestación, el grafiti, que no pretenden juzgar. Cierra Moreno: «No nos posicionamos ni de un lado ni de otro. Damos a entender que cada uno debe sacar sus conclusiones. Para nosotros, sería como culpar a alguien que hace cuchillos del uso que cualquiera les dé. Puedes hacer mucho bien con el grafiti, depende de cómo lo uses».