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El Balcón de Europa es el corazón turístico de Nerja. Este espolón de tierra que se adentra en el mar, y que se asemeja a ... un barco, fue durante siglos el emplazamiento de un castillo de origen medieval, el conocido como Castillo Bajo. La zona recibe a diario a miles de personas, que disfrutan de las vistas espectaculares del mar Mediterráneo y del telón de fondo de la Sierra Almijara, con sus picos de más de 1.800 metros de altitud. Junto con la iglesia de El Salvador, constituye un enclave de referencia histórico para todos los nerjeños, que lo llaman cariñosamente 'El Paseo'.
En la barandilla que hay en el extremo más meridional del impresionante mirador está instalada, desde febrero de 2003, una escultura del rey Alfonso XII, obra del artista torreño Francisco Martín. En la placa que hay a sus pies se alude a la visita que el monarca borbón realizó en enero de 1885, tras el terremoto de Alhama de Granada de la Nochebuena de 1884, en la que se señala que él fue quien bautizó este entorno como el Balcón de Europa.
Sin embargo, esta afirmación no es en absoluto cierta, tal y como han venido advirtiendo en las últimas décadas historiadores locales como Federico Bomberelli, Francisco Capilla o el abogado e investigador Pablo Rojo. Ahora el Museo de Nerja ha localizado un acta de un pleno de 1874 en el que se confirma lo que ya en los años noventa del pasado siglo había descubierto el maestro y librero Federico Bombarelli.
«Del Balcón de Europa existe en Internet información detallada en el blog que tiene el historiador Paco Capilla, pero también muy bien posicionado aparece un artículo reciente del National Geographic titulado 'Por qué Nerja tiene un Balcón de Europa' donde, entre otras inexactitudes, se afirma que fue el rey Alfonso XII quien le dio dicho nombre tras visitar Nerja en 1885», explican desde el espacio museístico de Nerja, inaugurado en 2011, en un mensaje difundido en sus redes sociales.
Dar la autoría del nombre Balcón de Europa a Alfonso XII sigue en gran parte del imaginario colectivo y, como se puede comprobar, perdura hasta nuestros días. Según la documentación del Archivo Histórico, los mencionados Federico Bombarelli en 1986, Pablo Rojo en 1990 y Paco Capilla en 2013, demostraron que antes de la llegada del rey, el 20 de enero de 1885, existían documentos, del 4 de enero de 1885, 1854 y 1839, respectivamente) que acreditaban que el enclave se le denominaba ya Balcón de Europa.
«A lo comentado anteriormente, añadimos este documento del pleno del Ayuntamiento de Nerja de 27 de junio de 1874, más de 10 años antes que llegara el monarca a Nerja», han explicado desde el Museo de Nerja en las redes sociales. En el mismo, siendo alcalde Francisco Bueno Morillas, padre de Alejandro Bueno García, se produce una solicitud de Antonio Arce Luque para construir un almacén en la playa de Calahonda donde, en uno de sus límites, limitaba al oeste «con los cimientos del paseo público en su extremo nombrado balcón de Europa».
«La solicitud fue aprobada y Antonio Arce Luque, que tenía una tienda de tejidos en la calle Puerta del Mar, pudo construir su almacén, el cual pudiera se la construcción que está más a la izquierda de estas fotografías de principios del siglo XX», han detallado aportando varias imágenes históricas. Justo un año después, en 1875, Antonio Fernández Morfil y Gerónimo de Guevara y San Juan realizaron sendas solicitudes al Ayuntamiento de Nerja «para poder edificar dos almacenes en la misma Calahonda, pero fueron calificadas como improcedentes por ser terrenos de dominio naval y uso público».
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