El tranvía de Vélez-Málaga regresa de su alquiler en Sidney

La primera de las unidades móviles ha llegado dividida en dos camiones de transporte especial, tras volver a España desde Australia en barco, y los operarios estuvieron durante varias horas descargando el vehículo, ensamblando sus dos partes y colocándolo sobre los raíles del trazado para conducirlo hasta su cochera.

El regreso del tranvía ha pillado por sorpresa a los vecinos, ya que cuando se formalizó el alquiler, se anunció que sería por un periodo de dos años, aunque finalmente, el transporte ha vuelto diecisiete meses después de su marcha.

El alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla (PP), ha explicado que el vehículo ha llegado en "perfectas condiciones", aunque ha precisado que en los próximos días, será objeto de una serie de pruebas para comprobar que "todo está correcto".

Delgado Bonilla ha asegurado que la vuelta del tranvía es una prueba de la "voluntad" del Ayuntamiento de que el servicio, paralizado desde junio de 2012, entre de nuevo en funcionamiento, pero ha indicado que para que ello sea posible, la Junta debe cumplir sus compromisos en cuanto a la financiación del déficit de este transporte.

En desequilibrio

"Siempre he luchado para que el tranvía vuelva a funcionar, pero soy consciente de que no puedo poner al Ayuntamiento en una situación de desequilibrio, y no estoy exigiendo nada más que lo que la Junta prometió en su día", ha añadido.

Ha recordado que el Consistorio ha solicitado al Gobierno andaluz que asuma el 75 por ciento del déficit del tranvía, con un convenio similar al que se ha firmado para el metro de Málaga.

Por otro lado, el regidor ha señalado que las actuales unidades del tranvía de Vélez-Málaga son "muy pesadas y con un alto consumo energético", y no ha descartado que CAF, la empresa constructora a través de la cual se ha llevado a acabo el alquiler con Sídney, pueda venderlas a otro destino.

"Nosotros apostaríamos por unas unidades más cortas, que es lo que necesita Vélez-Málaga, y más avanzadas tecnológicamente", ha agregado.

Ha insistido en que el alquiler del tranvía, que se llevó a cabo con todos los informes favorables y un canon anual de 200.000 euros, era la mejor fórmula para rentabilizar la inversión y garantizar el máximo mantenimiento de los vehículos.

Asimismo, ha precisado que este sistema tranviario continúa a la espera de su fiscalización por parte del Tribunal de Cuentas, "porque desde el punto de vista de la viabilidad, fue un error su puesta en marcha".

El tranvía, que ha supuesto una inversión de unos cuarenta millones, conectaba desde octubre del 2006 el casco urbano principal de Vélez-Málaga con el núcleo costero de Torre del Mar, en un trazado de 4,7 kilómetros, que debería haberse ampliado en una segunda fase de 1,2 kilómetros, que nunca entró en servicio.