Muere un hombre al caerle encima el eucalipto que talaba en Cútar

Los árboles, de gran tamaño, estaban situados en los alrededores de la vivienda de este vecino de Cútar, agricultor de profesión, que deja viuda y dos hijos menores de edad. Al parecer, según ha podido saber este periódico de diversas fuentes consultadas cercanas a la investigación, el grupo estaba talando los árboles con la ayuda de un camión-pluma.

Tras varias jornadas de trabajo, en la tarde del pasado viernes, cuando ya apenas les quedaban un par de árboles por cortar, uno de los troncos que habían talado se precipitó al suelo, golpeando fuertemente en el pecho de la víctima, que quedó aprisionado por el árbol. Rápidamente, los demás hombres que estaban allí con él trabajando acudieron a socorrerle, pero Santiago Donato Santiago Muñoz, que mantuvo la consciencia en todo momento, les aseguró que no podía mover las piernas y que sentía un fuerte dolor en el pecho.

Hasta el lugar se trasladó una ambulancia de emergencias sanitarias, que inició el traslado del herido hasta el Hospital Regional Carlos de Haya, ante la gravedad de las heridas y la fuerte hemorragia interna que sufría el hombre. De hecho, el fallecimiento se produjo en la misma ambulancia, según apuntaron las fuentes consultadas ayer por este periódico. El cuerpo sin vida de este vecino de Cútar, que tiene dos hermanos y una hermana, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal (IML) de la capital malagueña para practicarle la autopsia. Sus familiares esperaban ayer en uno de los dos tanatorios de Vélez-Málaga para poder enterrarlo hoy.

Los alcaldes de Cútar y Benamargosa, Francisco Ruiz (PP) y José Gallego (PP), respectivamente, lamentaron lo ocurrido y trasladaron sus condolencias a familiares y amigos. «Era un chico muy trabajador y alegre, es una verdadera pena, lo sentimos mucho», coincidieron ambos.

Suceso parecido en Almáchar

No es la primera vez que ocurre un suceso similar en la comarca oriental. El pasado 7 de noviembre moría un vecino de Almáchar, Juan Pérez Gómez, de 48 años, al sufrir un infarto mientras cosechaba aguacates en una finca de su hermano, Andrés, de 43 años. La principal hipótesis con la que trabajaron los sanitarios y el forense del Juzgado de Vélez-Málaga desplazados hasta el lugar es que el hombre sufrió un infarto fulminante, aunque en un primer momento se barajó la posibilidad de que se hubiese caído desde lo alto de un árbol.