Juanma Moreno promete continuidad y señala el combate a la «pandemia de la inflación» como prioridad de su Gobierno
El candidato a la reelección anuncia una rebaja fiscal de 620 millones de euros y una mejora de los servicios públicos
Continuidad con las politicas aplicadas durante el primer mandato, combate a la «pandemia de la inflación», fortalecimiento de los servicios públicos y fomento de una ... economía sostenible con las políticas hídricas en primer plano. El candidato a la reelección como presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha presentado este miércoles ante el Parlamento surgido de las elecciones del pasado 19 de junio las líneas programáticas para los próximos cuatro años.
Lo hizo en un discurso de una hora y media que comenzó comprometiéndose a no usar su mayoría absoluta como un rodillo frente a las fuerzas mayoritarias y concluyó reivindicando un papel fundamental para Andalucía en el conjunto de España y reclamando lealtad al Gobierno central.
Moreno, que será proclamado este jueves con los votos de su grupo, propuso un programa de Gobierno continuista en el que se comprometió a dar continuidad a lo que considera que ha funcionado en su primer mandato como presidente: el fortalecimiento de los servicios públicos -educación, sanidad y dependencia-, la reforma fiscal para hacer de Andalucía una región atractiva a las inversiones, la simplificación administrativa, en la que se comprometió a conseguir la participación de las entidades locales, y el impulso de una nueva economía vinculada en la sostenibilidad, la innovación y el conocimiento.
Moreno hizo especial hincapié en la situación económica y subrayó que, tras superar la pandemia del Covid, Andalucía «se enfrenta a una nueva pandemia llamada inflación que está provocando un deterioro de enorme magnitud en nuestra sociedad».
Señaló a las familias andaluzas como las víctimas de esta alza sostenida de los precios y advirtió de que, tal y como lo hizo durante la pandemia, el Gobierno andaluz buscará su propio camino para avanzar.
Tras pedir al Gobierno central un plan coherente para afrontar esta situación, ya que la Administración autonómica no cuenta con las herramientas competenciales suficientes, situó a los Presupuestos de la Junta como el instrumento esencial para hacer frente a la situación, con garantía de estabilidad y de contar con unas cuentas públicas claras y ordenadas. Será, dijo, un presupuesto con un marcado carácter social que, en la senda de los anteriores, priorizará la sanidad, la educación, las políticas sociales y la creación de empleo.
En esta línea adelantó un nuevo paso en la rebaja de impuestos con medidas fiscales que supondrán «un balón de oxígeno» de 260 millones de euros en los bolsillos de las familias y que a lo largo de la legislatura tendrá un impacto positivo en las economías de rentas medias y trabajadoras de 620 millones de euros.
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