La Junta de Andalucía pide al TSJA el toque de queda en los municipios con más contagios

El Gobierno autonómico limita el aforo en bares y restaurantes: desde la medianoche del miércoles al jueves no se permitirán más de cuatro personas por mesa en interiores. En terrazas se mantienen los aforos aprobados hasta ahora: diez personas por mesa en nivel 1, ocho en nivel 2, seis en nivel 3 y cuatro en nivel 4. El servicio y consumo en barra en exteriores sólo está permitido en los niveles de alerta 1, 2 y 3. El servicio y consumo en barra en exteriores sólo está permitido en los niveles de alerta 1, 2 y 3. La mayoría de la provincia de Málaga se encuentra de momento en nivel 2, con la excepción de la Serranía. El aforo de los bares de copas queda limitado al 75 por ciento en interior en nivel 1 y al 50 por ciento en nivel 2. En las celebraciones se reduce al 75 por ciento el aforo máximo en nivel 1, con un máximo de 200 personas y cuatro comensales por mesa. En el nivel 2, el aforo máximo permitido será del 75 por ciento con un máximo de 150 personas. El servicio en barra tampoco estará permitido en el interior, mientras que en el exterior sólo estará permitido el servicio en los niveles 1, 2 y 3, con el servicio supeditado a que se sirva en mesa.

El consejero de Salud, Jesús Aguirre, reitera a los ayuntamientos la petición de que controlen el ocio nocturno, garanticen el uso de la mascarilla en exteriores cuando así lo exige la ley (si no se puede guardar la distancia social de metro y medio) y eviten la organización de botellones. Aguirre también reclama el cierre de las playas entre las once de la noche y las siete de la mañana en municipios con niveles de alerta 2, 3 y 4, como Málaga capital y la Costa del Sol (ambos distritos en nivel 2), aunque los servicios de restauración como los chiringuitos quedan excluidos de esta medida.

La tasa de contagios en Andalucía ha escalado hasta los 411 casos por cada cien mil habitantes en las últimas dos semanas. No se registraba una cifra tan alta desde mediados de febrero, hace ya más de cinco meses. La curva presenta una subida más vertical que en las anteriores olas, con la incidencia acumulada casi triplicada en apenas veinte días. El número diario de positivos diagnosticados continúa siendo muy alto. Ayer se notificaron otros 3.687 casos, de los que 1.137 corresponden a Málaga. La franja de edad de entre 15 y 29 años concentra la mayor parte de nuevos contagios. El final del curso y el comienzo de las vacaciones han multiplicado los contactos entre los jóvenes, precisamente el grupo de edad menos cubierto por la vacunación.

Este incremento de contagios ya se nota en la presión hospitalaria. Andalucía sumó ayer 146 nuevos pacientes, también la cifra más alta desde febrero, cuando la región lidiaba con el pico de la tercera ola. La comunidad autónoma ya acumula 858 ingresados por Covid-19, de los que 147 se encuentran en cuidados intensivos. Un análisis provincial de la pandemia vuelve a evidenciar que Málaga arrastra los peores datos de este quinto zarpazo de la enfermedad, con 313 personas hospitalizadas, más de 70 en las últimas horas. La presión también ha aumentado en la atención primaria, con los centros de salud al límite de su capacidad por la escasez de personal, acentuado por las vacaciones sin cubrir, y la sobrecarga de trabajo que supone asumir las labores de rastreo y el seguimiento telefónico de los enfermos que no requieren hospitalización.