'Acusados' se despide esta noche con un final de sorpresa

El misterio dominó ayer la rueda de prensa sobre el final del primer ciclo de 'Acusados', que hoy a partir de las 22.15 horas se despide temporalmente de la audiencia con un capítulo que despejará todas las incógnitas que durante 13 capítulos ha suscitado el caso 'Metrópolis'.

«La gente se va a quedar muerta. Será la guinda de un pastel que dejará muy buen sabor a la audiencia. Todo lo que se verá es tremendo, complejo y muy real. Y, como señal de respeto a la audiencia, nada truculento», apostilló Blanca Portillo, a quien el traje de la jueza Rosa Ballester le sienta como un guante.

Portillo dijo no saber todavía nada del contenido de la próxima entrega, a la que se enfrenta «con la misma ilusión que en la primera». No en vano, sostuvo: «Estoy enamorada de Ballester, quiero seguir en su pellejo y que la gente también se enamore de ella, a pesar de tener, como todos, facetas detestables. Sé que la segunda temporada será mejor que la primera. El riesgo es mínimo y las ganas son muchas».

Y de la jueza, al político que provocó el suicidio de su hija, Joaquín de la Torre, es decir, José Coronado. Tan entusiasmado como su compañera, el actor, que el lunes inicia el rodaje de la nueva película de Vicente Aranda, 'Luna caliente', aseguró que la emisión de hoy es «cine puro y duro».

Captar a los jóvenes

Portillo y Coronado estarán arropados por la mayoría de los intérpretes del reparto original en el nuevo pase de 'Acusados', al que quieren incorporar a un público más joven con los fichajes de dos actores, uno masculino y otro femenino, y un niño que será testigo de un asesinato.

Con cuentagotas, Goyo Quintana, máximo responsable de la productora de 'Acusados' (Ida y Vuelta) comentó que en la segunda temporada harán «cómplices a los espectadores de cosas que los personajes no saben». Este cambio estructural se traducirá en una participación más activa de la audiencia en esta serie que en la actualidad sigue más de tres millones de personas.