La policía encuentra restos de sangre en la habitación en la que desapareció Madeleine
Los agentes judiciales se centran en Robert Murat como principal sospechoso y no descartan que la niña británica fuera víctima de un accidente o un acto violento
BELÉN RODRIGO
Martes, 7 de agosto 2007, 03:58
Restos de sangre en el cuarto donde dormía Madeleine, que pueden ser de la propia niña, relanzan las investigaciones del caso y la policía lusa ... estudia ahora la posible muerte de la pequeña dentro del hotel. Poco falta para que se cumplan cien días de la desaparición de Madeleine y el hallazgo de nuevas pistas han llevado a afirmar a las autoridades policiales portuguesas que las averiguaciones sobre el caso están en una fase crucial. Ayer varios medios hablaban de la existencia de restos de sangre en la habitación donde el matrimonio McCann dejó a sus tres hijos durmiendo mientras cenaban en un restaurante de la misma urbanización.
Según el rotativo luso 'Jornal de Noticias', en las paredes del cuarto han aparecido vestigios de sangre de una persona muerta, presumiblemente de la pequeña Maddie. Una muerte que no tiene porqué haber sido un homicidio sino que se sostiene una muerte por accidente o por un acto violento. El portavoz de la Policía Judicial en Portimão, Olegario de Sousa, no confirmó ni desmintió ayer esta noticia sino que se limitó a decir que en el momento oportuno serán reveladas nuevas informaciones sobre la investigación, que está en «un momento crucial» y que en estos momentos no se descarta ninguna hipótesis.
Análisis minucioso
El domingo el apartamento de los McCann fue sometido a un minucioso análisis por parte de los técnicos de la Policía Judicial. Estos restos de sangre fueron descubiertos la semana pasada, con la llegada de perros ingleses perfectamente entrenados para detectar vestigios biológicos de personas que están muertas, sin que importe el tiempo que haya pasado desde que fueran dejados.
Estos datos revelan además que los investigadores no tienen dudas de que se trata de sangre de la pequeña Maddie y también que están a la espera del resultado de los análisis más detallados para confirmar todos los datos.
La muerte de la niña es prácticamente dada como cierta pero existen muchos cabos por atar en toda esta investigación, sobre todo en lo que se refiere al destino del cuerpo. También ayer se avanzaban nuevos datos sobre el caso de Madeleine en el periódico británico 'The Sun', donde citando una fuente policial avanzan que existe un segundo sospechoso: 'Murat no es el único hombre. Otro hombre ha estado bajo vigilancia hace varias semanas'.
Según dicha fuente «factores relacionados con su pasado en el momento de la desaparición llevaron a la policía a sospechar que esta persona pueda estar envuelta». Los tabloides 'Daily Mirror' y 'Daily Express' citan igualmente en sus páginas a este nuevo sospechoso que se trataría de un cómplice, un hombre que llevaba una niña envuelta en una manta la noche de la desaparición. Todo indica que este hombre no está muy involucrado en los hechos pero debe saber dónde está la niña.
El sábado se cumplen los cien días de la desaparición de la pequeña y por este motivo su madre ha concedido entrevistas a los semanarios 'The Observer' y 'Sunday Times', donde expresa el sufrimiento de la familia.
Recuerdos tristes
De la noche del 3 de mayo, Kate McCann afirma haber sentido miedo y pánico cuando vio que su hija no estaba. Kate, que se sometió a varios tratamientos contra la infertilidad para quedarse embarazada de Madeleine, asegura arrepentirse «desesperadamente de no haber estado en ese momento».
Sobre las críticas que han recibido por toda la publicidad que este caos está recibiendo a nivel mundial, la madre de Madeleine se pregunta qué otra cosa es lo que pueden hacer para encontrar a la niña que no sea divulgar su imagen por todo el mundo.
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