Más de un centenar de jóvenes inmigrantes pierden la tutela anualmente al cumplir 18 años

Al menos hasta que cumplen los 18 años. Entonces, vuelven a estar solos, con derecho de residencia pero sin apenas recursos en plena crisis para cumplir su proyecto migratorio: Encontrar un trabajo con el que poder ayudar a sus familias en el país de origen. El pasado año, un total de 125 jóvenes inmigrantes dejaron de estar protegidos por la Junta al llegar a la mayoría de edad.

Repunte entre 2005 y 2009

El repunte más importante de menores extranjeros no acompañados (MENA), se produjo entre los años 2005 y 2008, con una media en la provincia de 250 llegadas al año. Isidro Ramos, jefe del servicio de Protección de Menores de la Junta de Andalucía en Málaga, señala que, en esos años, el pico más alto de entrada de niños tutelados a sus centros de acogida fue de 410, de los que más del 40% eran MENAS, cuando lo normal antes de 2005 era que apenas llegasen al 10%.

Ramos explica que, una vez que la Junta asume la tutela, el menor pasa en un primer momento a un centro de acogida inmediata donde, por un máximo de tres meses, la Junta trabaja en averiguar información sobre su identidad e inicia el desamparo, del que se da parte al consulado que corresponda. «La mayoría de los subsaharianos llegan con pasaporte, pero los marroquíes -que suponen el 90% de los MENAS- llegan completamente indocumentados», afirma Ramos.

Disminución de llegadas

Tras el desamparo, la Junta traslada al menor al centro residencial básico, donde se escolariza si tiene menos de 16, o se le ofrece formación laboral y empiezan a tramitarse sus documentos, pasaporte y permiso de residencia en España. La Junta cuenta en la provincia con dos centros de menores propios en Torremolinos y Torre del Mar -tanto para menores extranjeros como para españoles- y otros 33 centros conveniados con asociaciones.

Isidro Ramos indica que la llegada de menores a Málaga ha disminuido en los últimos dos años. A finales de 2010, solo había 119 niños bajo la tutela de la Junta en los centros existentes en la provincia. Y los que entraron en años anteriores están alcanzando ya los 18 años.

¿Qué ocurre cuando cumplen la mayoría de edad? Pese a no tener la obligación legal, la Junta les ofrece apoyos a través de las ONG. El pasado mes de mayo, la fundación Diagrama, subvencionada por la Junta, atendió a 173 MENAS extutelados.

Por otro lado, la asociación Prodiversa cuenta con 12 plazas conveniadas para ofrecer alojamiento temporal a estos jóvenes. Aunque Ramos reconoce que muchos de estos jóvenes lo pasan mal cuando salen de los centros. Las redes tratan de hacerles más fácil una emancipación forzosa y a veces incierta.