El circo de Petra Ecclestone

Rubia, alta, delgadísima y heredera, junto a su hermana, de una fortuna que ronda los 3.000 millones de euros y -aunque su nombre también empieza por 'p'- no hablamos de Paris Hilton, con la que muchos la comparan. Ella es Petra Ecclestone (Londres, 1988), la hija pequeña del dueño de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, y su exmujer, la modelo croata Slavica Radic. Mientras la loca de Paris va y viene con sus sucesivos amoríos, esta joven inglesa de 22 años prepara una boda de esas que hacen historia, como la de Alberto de Mónaco y Charlene Wittstock, pero en plebeyo. Y ya puede serlo, porque papá Ecclestone se va a gastar la friolera de millón y medio de euros durante las 72 horas que durararán las celebraciones.

En los próximos días -la fecha se mantiene en el más absoluto secreto-, dejará de ser la señorita Ecclestone para convertirse en la señora de James Stunt, un coleccionista de vinos de 27 años e hijo de un donante del Partido Conservador británico. Un niño pijo de Chelsea -uno de los barrios de alto standing de Londres-, por donde se pasea subido en su Lamborghini amarillo con matrícula 'S7UNT'.

Visto el perfil de los novios, el enclave elegido para el enlace no podría desprender más glamour: el castillo italiano de Odescalchi, muy cerca de Roma. Una fortaleza del siglo XV donde en 2006 contrajeron matrimonio los actores Tom Cruise y Katie Holmes. El capricho de vivir una boda de cuento de hadas cuesta 355.000 euros, que incluyen el catering y el hospedaje de los 300 invitados. Entre ellos, se espera a las princesas Beatriz e Eugenia, hijas de Sarah Ferguson, amigas íntimas de la novia.

Los que ya tienen el billete de avión reservado para Italia son Eric Clapton y los Black Eyed Peas, que pondrán voz al convite. No es usual ver al guitarrista dar este tipo de espectáculos privados, pero la amistad que le une al magnate de la Fórmula 1 y los 275.000 euros que cobrará parece que le han animado. El grupo americano por su parte se embolsará otros 860.000 euros, a repartir entre los cuatro componentes. Y para rematar una noche de buena música, la gran traca final. El espectáculo de fuegos artificiales, otros 46.000 euros más en la factura.

Que a nadie le pille por sorpresa tan amplio despliegue de medios cuando el que organiza el evento es Peregrine Armstrong-Jones, quien también se encargó de casamientos tan fastuosos como el de David y Victoria Beckham, el de Elthon John o, más recientemente, el de la nieta de Isabel II, Zara Phillips.

El gran secreto

Otra especialista en bodas VIP es la diseñadora Vera Wang. Ella ha sido la elegida para el arriesgado cometido de confeccionar el vestido de novia. La neoyorquina, editora durante 16 años de la revista 'Vogue', sabe lo que se hace y las famosas confían en su buen ojo. Mariah Carey, Chelsea Clinton, Jennifer Lopez o Sharon Stone optaron por ella. Del diseño de Petra no ha trascendido ni el más mínimo detalle, ni siquiera su precio, pero la última boda hollywoodiense puede darnos una pista. La celebrity norteamericana Kim Kardashian, que se casó el pasado sábado, lució varios modelos de Wang que la prensa del país cifra en 15.000 euros cada uno. Si tenemos en cuenta que la de Ecclestone se prolongará durante tres días, a un mínimo de un traje por día... ¡Hagan cuentas!

Los regalos que recibirán los Stunt, sin embargo, quedan fuera del repertorio de precios astronómicos. Petra, que sufrió meningitis con 14 años, está muy involucrada en la asociación de apoyo e investigación de esta enfermedad, por lo que ha pedido a sus invitados que donen el dinero de sus obsequios a este fin.

La lista de gastos de la boda empezó a engrosarse en mayo, cuando la pareja celebró su fiesta de compromiso. Engalanaron una antigua central eléctrica londinense, conocida por la película 'Help!' de los Beatles y la portada de un álbum de Pink Floyd. Entre las paredes del antiguo edificio la cantante Rihanna -llegada en helicóptero desde Paris- deleitó a los invitados con su voz por el nada módico precio de 300.000 euros. El total de la fiesta, casi 700.000.

Para redondear el compromiso no podía faltar el regalo de pedida, que se aleja del tradicional anillo; unos pendientes de diamantes que a Petra le resultan «monos» y que están valorados en 92.000 euros. Estos sí, pagados por el novio.

Y suma y sigue, porque todo lo que a esta chica se le antoja tiene precios desorbitados. Mientras la mayoría de los mortales de su edad termina sus estudios e intenta iniciar su vida laboral, ella ya ha adquirido dos mansiones multimillonarias. Los Stunt disfrutarán de su nueva vida de casados a caballo entre Londres y Los Ángeles.

La de EE UU es la casa más grande de la ciudad y la segunda más cara vendida en el país en lo que va de año, aproximadamente 60 millones de euros. Se trata de la mansión 'The Manor', construida por Aaron Spelling, productor de las míticas series 'Los ángeles de Charlie', 'Sensación de vivir' o 'Dinastía'. El imponente edificio de 5.000 metros cuadrados se sitúa en el opulento barrio de Holmby Hills, cerca de Beverly Hills, y dispone, entre sus más de 100 habitaciones, de un cuarto para envolver regalos, una bolera y un refugio anti bombas.

Para la elevada transacción, Petra ha tenido que pedir algunos cuantos millones. De los 670 que su madre obtuvo por su divorcio en 2009, le ha prestado 57 a su hija menor. «Es una gran inversión y conseguí un buen trato», comentó ilusionada la nueva dueña a ABC News, refiriéndose a la rebaja del precio inicial de la propiedad, tasada en 104 millones.

La casita londinense, comprada a principios de año, tampoco se queda corta. De hecho, la vivienda del exclusivo barrio de Chelsea fue aún más cara que la americana, 64 millones. Aquí los gastos corrieron a cargo de su padre.

El lujo de Tamara

Con tanto mimo hacia la benjamina, Bernie y Slavica no podían negarle a su primogénita, Tamara, tener su propia vida de lujo y adquirieron para ella otra casa de 51,5 millones de euros en Kensington. A pesar de su cabellera morena y los 'caprichos' de su hermana, ella es la que mejor adopta el papel de 'la Paris Hilton inglesa'. Recorre los clubs más VIP de toda Europa, sale ligerita de ropa de tartas enormes y prepara su propio 'docu-reality' para mostrar la vida de una niña bien.

Porque no todos sus anhelos corren por cuenta de papá y mamá. Las hermanas han emprendido diferentes caminos profesionales. Petra es diseñadora y en 2008 vendió con éxito una colección para hombre, mientras su hermana Tamara lucía palmito en la televisión italiana retransmitiendo la Fórmula 1. Un entretenimiento para subsistir hasta que el ya octogenario Ecclestone reparta su abultada herencia.