Los fugitivos de Sevilla, buscados ahora por un apuñalamiento en Antequera

Los delincuentes, encarcelados por homicidio y robo con violencia, respectivamente, se escaparon de la prisión durante la noche del miércoles al jueves. Su ausencia fue detectada a las 7.30 horas, cuando los funcionarios pasaron lista y en el recuento comprobaron que faltaban dos presos. Cuando se descubrió la fuga, ya habían tenido tiempo de poner pies en polvorosa.

En las pocas horas que llevan en la calle, y mientras los Cuerpos de Seguridad los buscan por todo el país, ya han sido reconocidos como presuntos autores de un nuevo hecho criminal. Según confirmaron a SUR diversas fuentes consultadas, los dos prófugos supuestamente apuñalaron a un joven para robarle.

Los hechos sucedieron a las siete de la tarde en la avenida del Romeral, en el polígono industrial de Antequera. Las pesquisas policiales apuntan a que los sospechosos habrían abordado a un trabajador para atracarle. Según las fuentes consultadas, la víctima se negó a darles el dinero y ellos habrían reaccionado asestándole varias cuchilladas.

Traslado al hospital

El joven, que es vecino de Antequera y que trabaja para una cadena de supermercados, recibió dos puñaladas en la espalda y una en el pecho. Fue auxiliado por una patrulla de la Policía Nacional, que acudió al lugar de los hechos minutos después del suceso. Al ver las lesiones que presentaba, los propios agentes lo trasladaron en su coche patrulla al Hospital Comarcal de Antequera. Las puñaladas no le dañaron ningún órgano vital y ayer mismo recibió el alta médica.

Para entonces, los agresores ya se habían esfumado del lugar, aunque la policía logró identificarlos muy pronto. A las nueve de la noche, los investigadores ya tenían meridianamente claro que los presuntos autores del apuñalamiento eran los dos internos que habían escapado de Sevilla I a tenor de la descripción física facilitada por testigos. Se movían, según las pesquisas policiales, en un automóvil con matrícula de otra provincia.

La fuga de Rafael Hildalgo, alias 'El Rafi', y Mohamed Larli comenzó la madrugada del jueves. Aprovechando el fuerte aguacero que cayó esa noche, los dos internos hicieron un agujero en la pared de su celda, tras quitar el espejo metálico que hay sobre el lavabo y romper una pequeña puerta por la que acceden los fontaneros a las tuberías, sin llamar la atención de los funcionarios. Desde ahí salieron a la galería y se dirigieron a una ventana, desde la que saltaron al campo de fútbol. Una vez allí, se valieron de una manguera para trepar el tejadillo de unas oficinas y dos muros, uno de ellos junto a la garita de la Guardia Civil. Una vez allí, llegaron al exterior y recobraron la libertad.

Ambos estaban considerados presos «conflictivos». Mohamed Larli, marroquí de 22 años, cumplía una condena a tres años y seis meses de prisión por robo con violencia, y tenía una causa preventiva por hechos de la misma naturaleza. En octubre, ingresó en Sevilla I. Un mes más tarde entró Rafael Hidalgo, natural de la provincia de Córdoba, de 28 años, para cumplir una pena de siete años y seis meses por diversos robos. Además, arrastraba una causa preventiva por homicidio.

'El Rafi' está acusado de matar a José Reyes González, al que supuestamente descerrajó un disparo en la cabeza en el transcurso de una reyerta entre dos familias en la localidad cordobesa de Bujalance. En esos momentos, el joven estaba en busca y captura por no haber vuelto a la cárcel tras disfrutar de un permiso carcelario.