La trama roza a Puigdemont

En ese periodo, la consultora de cabecera de Convergència obtuvo jugosos contratos para externalizar servicios que debía haber prestado el consistorio. Al menos tres de esas adjudicaciones están bajo la lupa de la Guardia Civil.

El ayuntamiento que dirigía Puigdemont cerró convenios con Efial por, al menos, 113.000 euros, sin que en ningún momento justificara por qué su entidad pública empresarial local derivó en la consultora esos trabajos.

No es la primera vez que el nombre de Puigdemont aparece ligado a la investigación del juzgado de El Vendrell sobre el 3%, de la que deriva la 'operación Termyca'. De hecho, el origen de la redada efectuada ayer y las primeras pistas sobre los desmanes de Efial surgen de las actuaciones de la Guardia Civil a finales de junio de 2014 en Torredembarra (Tarragona), en las que fue detenido el alcalde, Daniel Massagué, de CiU. Entonces, la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC) ya abrió una investigación sobre presuntas irregularidades en el consistorio de Gerona.

La Guardia Civil tiene intención de pedir en breve a la OAC los resultados de esas pesquisas, una petición que ha irritado a Convergència. Cuando la Oficina Antifraude de Cataluña puso en su punto de mira a Pugidemont estaba dirigida por Daniel de Alfonso, el interlocutor del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en las conversaciones grabadas en las que ambos conspiraban para buscar pruebas contra los soberanistas.

Aquellas conversaciones entre el hoy ministro en funciones de Interior y el ya cesado director de la OAC tuvieron lugar en octubre de 2014, solo meses después de que Antifraude se interesara por la gestión del actual presidente catalán al frente del consistorio gerundense.

Mandos del operativo explicaron que no hay indicios de que Puigdemont autorizara personalmente los contratos bajo sospecha a Efial, aunque quieren conocer hasta qué punto su equipo, cuando llegó en 2011 a la alcaldía de Gerona, sabía que la entidad pública empresarial local estaba en manos de los empresarios corruptos y que estos hacían y deshacían a su antojo a pesar de las quejas de los técnicos municipales.

Amigo personal

Otro de los puntos de conexión con la trama desarticulada es el principal detenido, Josep Manel Bassols, exalcalde convergente de Anglès (Gerona) entre 1995 y el 2003 y amigo personal de Puigdemont, hasta el punto de que en 2011 fue su jefe de campaña en las elecciones municipales que convirtieron al hoy presidente de la Generalitat en regidor de la Gerona.

Bassols, destacado 'fontanero' de Convergència en Gerona, ya fue detenido en 2015 en el marco de la 'operación Petrum', ordenada por el juzgado de El Vendrell, sobre el supuesto cobro de comisiones del 3% para la financiación irregular de Convergència. La esposa de Bassols, Núria Bassols, magistrada en excedencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, fue comisionada para la transparencia de la Generalitat. Fue nombrada por Artur Mas, pero el propio Puigdemont se vio obligada a destituirla por las duras críticas de Esquerra a la continuidad de la magistrada tras la detención de su marido.