«Que no haya más muertes así en España», dice el tío de la bebé afectada por tos ferina
Adrián García, que es hermano del padre de la bebé fallecida, explicó que su cuñada intentó vacunarse contra la tos ferina tras recomendárselo un ginecólogo privado
Ángel Escalera
Miércoles, 28 de octubre 2015, 00:21
La pequeña Lara falleció la semana pasada en el Hospital Materno al no superar las graves complicaciones que sufrió por culpa de la tos ferina. ... La niña tenía 15 días cuando se produjo su muerte. Adrián García, tío de Lara, en declaraciones hechas a ayer a este periódico, manifestó: «Este tipo de muerte no debería ocurrir más. No se trata de buscar culpables, pero hay que poner los medios para que un caso como el de mi sobrina no suceda más en España».
Adrián García, que es hermano del padre de la bebé fallecida, explicó que su cuñada intentó vacunarse contra la tos ferina tras recomendárselo un ginecólogo privado, pero por más que lo intentó no encontró la vacuna en ninguna farmacia.
«La desgracia de la muerte de mi sobrina podría haberse evitado si esa vacuna hubiese estado disponible. Pensándolo fríamente, no se puede comprender que haya un desabastecimiento de vacunas en la España de 2015», afirmó Adrián García.
Añadió que la parlamentaria andaluza del PP y exalcaldesa de Fuengirola, Esperanza Oña, se puso ayer en contacto con su cuñada para expresarle sus condolencias e indicarle que llevará el caso al Parlamento andaluz para tratar de buscar soluciones al problema del desabastecimiento de la vacuna contra la tos ferina para embarazadas. «Agradecemos el gesto de Esperanza Oña y esperamos que se tomen medidas para que una situación así no se vuelva a repetir», subrayó el tío de la pequeña. Los padres de la niña viven en Fuengirola. Lara era su primera hija.
La tos ferina es un enfermedad grave que tiene un comienzo insidioso, indistinguible de otras infecciones respiratorias leves (fase catarral) con tos irritativa que en una a dos semanas progresa y se agrava. En ese momento, los episodios con crisis de tos aumentan tanto en frecuencia como en intensidad. En la fase más grave, el niño infectado puede tener dificultad para respirar y, al tratar de inhalar, produce un ruido ferino (de ahí su nombre: tos ferina).
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