«El gasto en museos genera una renta inducida muy importante para la ciudad»

Acaban de rebajar la deuda por debajo del techo legal del 110%. ¿Toca sacar pecho?

Lo importante es que hemos mejorado la salud financiera del Ayuntamiento. Y no lo digo yo, ahí están el remanente positivo de Tesorería, el aumento de las ratios de liquidez y la disminución de la deuda. Ha sido un trabajo muy complejo. No es fácil aumentar la liquidez cuando nosotros pagamos en menos de 30 días a nuestros proveedores pero otras administraciones no nos pagan a nosotros igual. Si a eso unimos la implantación del flexipago para que los ciudadanos puedan ajustar el abono de los impuestos a sus necesidades, se hace muy necesario tener una hucha que garantice los pagos y gastos.

Pero no siempre ha sido así.

En su momento fue positivo invertir más de dos mil millones para transformar la ciudad porque había dinero para pagar, pero a raíz de la ley de estabilidad presupuestaria que establece tres principios fundamentales (pronto pago a proveedores, plan de estabilidad y deuda por debajo del 110%), el objetivo era reducir la deuda. Por eso el plan de ajuste aprobado no solo era necesario, también oportuno.

¿Quiere decir que se ha vivido por encima de las posibilidades?

La crisis ha servido para que todos hiciéramos un ejercicio de reflexión y ver cómo podíamos evitar gastos no prioritarios y mirar muchísimo por cada euro de los ciudadanos en una etapa que hay que gobernar con máxima responsabilidad porque hay muchas familias que lo están pasando mal y eso exige optimizar los recursos públicos para cubrir las necesidades de todos. Y todo ello sin mermar los servicios públicos.

Mantener los servicios públicos, y también los museos, porque en cánones y mantenimiento se va a ir un pico cuando se sumen los del Pompidou y del Museo Ruso.

Lo tenemos presupuestado. Hay que valorar que eso genera luego una renta inducida muy importante para la ciudad. Como ayuntamiento, a través de nuestras inversiones y de los miles de proveedores con los que trabajamos y a los que pagamos somos un motor económico en la ciudad.

¿Cuál es la situación de las arcas municipales a día de hoy?

Muy buena porque hemos hecho los deberes, como queda contrastado a través de indicadores económicos como la cuenta general de 2013 que arrojó un saldo positivo 122,9 millones, un remanente de tesorería de 89 millones, una ratio de liquidez mejor que nunca, reducción de deuda, pago a proveedores, estabilidad presupuestaria a 31 de diciembre de cada ejercicio,...

Se le ve lanzada. Y optimista.

Optimista, pero prudente, porque no basta con conseguir los objetivos marcados, hay que mantenerlos.

Aun así, no me negará que es considerable la deuda de 639,56 millones de euros con la que esperan cerrar el año.

Depende, si se compara con los dos mil millones invertidos no llega a un tercio. Está ahí, pero es asumible y podemos pagarla. Además, 102,9 de esos millones corresponden a créditos puentes de VPO que promovemos pese a no ser nuestra competencia.

O sea, ¿que es bueno endeudarse?

El endeudamiento no es ni bueno ni malo. Hay que contemplarlo en su justa medida , sobre todo si eres capaz de pagar a tus proveedores. Es cuestión de organización y gestión de los recursos, como en cualquier hogar.

Y también de recaudar más.

Incrementar la recaudación no significa necesariamente aumentar la política fiscal. La nuestra es muy moderada basada en la bajada y congelación de tributos. Por ejemplo, la actualización de los valores catastrales va a hacer que tengamos una caída de 9 millones por el impacto del IBI y plusvalías.

¿Me dirá que es casualidad que esta rebaja fiscal llegue precisamente en 2015, año electoral?

¿Electoralista? Es el resultado de una gestión basada en la moderación fiscal. Respecto al IBI, la actualización llevamos pidiéndola al Ministerio de Hacienda varios años pero nos dijeron que es a partir del quinto. Durante los primeros cuatro años se aplicaron bonificaciones potestativas para amortiguar la subida prevista desde 2009 y al siguiente bajamos el tipo de gravamen un 35%. ¿Es caro el IBI en Málaga siendo la quinta o sexta capital económica de España? Hay informes que nos sitúan en el puesto 46 de 48, incluyendo la tasa de basura.

Los vados sí que bajan ahora.

No es que bajen, es que al regularizarse la situación de algunos permite bajar la cuota a todos, pero la recaudación no varía. Por lo demás, tarifas como las del SARE, la grúa o la EMT se mantienen congeladas por segundo año consecutivo.

Pocas inversiones para 2015

Y las inversiones, ¿van a subir?

La política de inversiones dependerá de las reglas del gasto, así que no creo que haya administraciones que las aumenten ahora. Se trata de mantener esa línea y eso es lo que esperamos porque el escenario económico aún es complicado.

O sea, que poca inversión.

Los objetivos son mantener las medidas sociales, las políticas de empleo y las inversiones en los distritos, y a partir de ahí ver de dónde ahorrar para mantener los servicios. Y también acudiendo a la colaboración público-privada, que es positiva para hacer proyectos de ciudad y para reforzar el sector productivo.

Presumen de que el Ayuntamiento paga sus facturas en menos de 30 días, pero no así las empresas municipales.

No todas, pero las que no lo hacen en menos de 50. Me gustaría que estuvieran por debajo de 30 y estamos trabajando para ello.