El juez rechaza paralizar el Centro de Raqueta hasta que se resuelva la demanda

Según pudo conocer ayer este periódico, la decisión del juez, que hoy será conocida oficialmente por las partes, se basa en que, en el caso de que finalmente resolviera que la adjudicación del Centro de Raqueta por parte de la mesa de contratación de la Gerencia Municipal de Urbanismo no se llevó a cabo adecuadamente y la considerara nula, el daño causado a la demandante podría repararse con una indemnización económica.

El criterio en este caso del juzgado coincide con el expresado por el Ayuntamiento en su escrito para oponerse a la paralización del proyecto que solicitó Valssport-S.B.L. de forma cautelar, hasta que se resolviera su demanda, que ayer fue formalizada. Para el Consistorio resulta «perfectamente cuantificable, desde el punto de vista económico, los posibles perjuicios causados, una vez dilucidado el fondo de la cuestión», expresó el escrito enviado al juez por los letrados municipales.

Con todo, el proceso judicial emprendido por el recurso de la sociedad demandante, cuya oferta fue excluida del proceso de adjudicación junto con la de Ajanedo por considerar la mesa, en función de unos informes de Promálaga, que no justificaron la viabilidad económica de su proyecto, sigue su curso. Además, Valssport-S.B.L. sopesa recurrir el rechazo del juez a la paralización cautelar del proyecto.

No obstante, si se confirma que no a lugar a las medidas cautelares, la construcción del Centro de Raqueta podrá llevarse a cabo sin inconveniente alguno a cargo de Ferroser, que ya presentó el mes pasado la petición de licencia de obras para el complejo de pistas de tenis y de pádel, con un presupuesto de 1,5 millones de euros y un plazo de construcción de un año. Igualmente, la Gerencia de Urbanismo tiene en marcha el proceso para contratar la urbanización de los suelos en los que se asentará la construcción, junto al complejo de piscinas Inacua que también gestiona Ferroser. Esta urbanización, en una primera fase, está valorada en un millón de euros, con un plazo de ejecución de cuatro meses.