La brecha de género persiste en el tejido empresarial

Asesorías, sobre todo

Estos datos se confirman al auscultar el tejido empresarial malagueño: de las 600 empresas que constituyen la Asociación de Jóvenes Empresarios de Málaga (AJE) sólo el 24% están lideradas por mujeres. Por sectores, la presencia de empresarias destaca en asesorías y consultoría (21%) y en estética y belleza (17%), según AJE Málaga. Las cifras son especialmente llamativas en sectores como las telecomunicaciones (con un 6% de presencia femenina), construcción e inmobiliaria (2%) y agricultura y alimentación (1%). El sector de las tecnologías se sigue resistiendo a la paridad, con una escasa presencia femenina. En el Centro Europeo de Empresas e Innovación, Bic Euronova ubicado en el PTA tan sólo el 10% de las empresas incubadas corresponden a empresarias. De las 70 empresas a las que dan servicio actualmente, son siete las dirigidas por mujeres.

Más emprendedoras

Ya sea por las dificultades para ser contratadas por cuenta ajena o guiadas por el espíritu emprendedor, en los últimos años la tendencia a crear su propia empresa es mayor entre las féminas, aunque el crecimiento sea tímido. En febrero de 2008 el número de hombres afiliados a la Seguridad Social como autónomos era de 68.316 (68%) y el de mujeres de 32.579 (32%). Si bien, en febrero de 2016 el número de hombres afiliados era de 66.597 (64%) y el de mujeres de 37.055 (36%) en la provincia de Málaga.

«La presencia de la mujer en el mundo empresarial está creciendo en cuanto a que la edad de las empresarias cubre un espectro más amplio. Las nuevas emprendedoras son tanto jóvenes como mujeres de 50 años. Algunas porque ahora ven que pueden realizar su sueño y para otras como autoempleo», declara Macarena Regueira, presidenta de la Asociación de Mujeres Profesionales y Empresarias de Málaga (Amupema)

¿Por qué a las mujeres les cuesta tanto acceder a puestos de dirección? Isabel Alba, vocal de AJE, sostiene: «Encuentran dificultades para conciliar con su vida personal. Las reuniones suelen eternizarse y ponerse fuera de la jornada laboral». Otro punto importante son las bajas de maternidad/paternidad: «Suele ser un tema polémico porque no todos los colectivos entienden que deberíamos hablar de corresponsabilidad. En el caso de las autónomas las reformas son indispensables ya que no tienen ayudas para la contratación. En la asociación, contamos con casos en los que se ven obligadas a cerrar sus empresas. Una triste realidad que no se da en el colectivo masculino», comenta la vocal de AJE.

Desde Amupema lo confirman: «El tema del embarazo sigue frenando a la contratación de mujeres, quizás porque desconocen que hay medidas para que a las empresas la baja de maternidad no les suponga un dinero extra», asegura su presidenta. «La falta de guarderías de empresas o el reparto de tareas familiares siguen impidiendo que avancemos. No queremos tener que elegir entre montar la empresa o ser madres; entre coger un puesto directivo o ver a la familia. Ambas cosas pueden ser compatibles. Sólo hace falta una buena base social», asevera Regueira.