¿Qué le pasa a Felipe González con Susana Díaz?

Díaz es secretaria general del PSOE andaluz y responsable última de decidir si Chaves iría en la lista al Congreso de las próximas elecciones generales y si Griñán volvería a ser propuesto como senador por la Comunidad autónoma. Díaz nunca ha pedido a los expresidentes que renuncien a ello, aseguran fuentes del entorno de la presidenta en funciones, pero el PSOE andaluz, por boca de Mario Jiménez y Juan Cornejo, han valorado las decisiones de los expresidentes para allanar la investidura.

En este contexto las declaraciones de Felipe González vienen a cuestionar a Susana Díaz sin señalarla, aunque también ha admitido en la misma entrevista sus dificultades para ser investida presidenta y formar gobierno. No es la primera vez en los últimos meses que González marca distancias con la política sevillana, con quien a veces se le ha comparado. En plena campaña de las andaluzas le señaló que su sitio está en Andalucía desacreditando cualquier intento de dar el salto a Madrid. "Tiene personalidad, liderazgo y, pase lo que pase, estoy seguro de que dedicará su tiempo completo a Andalucía", manifestó en una entrevista a El País en marzo. Varias veces ha respaldado en público a Pedro Sánchez, con quien es conocida la rivalidad que tiene con Susana Díaz por el liderazgo del partido. En la entrevista en Antena3 ha reiterado su apoyo a Sánchez y ha dicho que es bastante probable que lo vote en las primarias.

González, de la generación de Griñán y Chaves, amigo personal de este (compartieron la famosa foto de la tortilla), ha defendido la presunción de inocencia de los dos. Uno de de los problemas de la degradación institucional en España es que la presunción de inocencia se ha convertido en la presunción de culpabilidad, ha manifestado en la cadena televisiva, según recoge Europa Press.

El expresidente ha defendido que la imputación no debería decidir si se está o no en la lista de candidatos, en alusión a que Chaves y Griñán han afirmado que no se postularán como candidatos al Congreso y el Senado, lo que les dejará sin aforamiento en el caso de los ERE si el Tribunal Supremo no archivara el caso. Chaves y Griñán están imputados, aunque no se les acusa por ahora de ningún delito.

González ha declarado que la decisión de Chaves y Griñán de renunciar ha sido personal y no han existido presiones directas, aunque sí indirectas en declaraciones de gente pidiendo que lo hicieran. El expresidente del Gobierno ha destacado que no duda de la integridad personal de Chaves y Griñán y que nadie en su partido piensa que se han llevado dinero público. "La duda está en si gestionaron bien o no", ha añadido, apostillando que cree que ha habido fraude pero que los expresidentes andaluces "no se han adueñado del dinero público ni han sido responsables de la actuación fraudulenta".

Un chantaje, según Chaves

Las declaraciones de González han coincidido con otras de Manuel Chaves en las que ha calificado de chantaje político la petición de Podemos y Ciudadanos de su renuncia a cambio de respaldar la investidura de Díaz. "Dos partidos que llegan con un pretendido nuevo talante y con un nuevo lenguaje, que en una negociación utilicen a dos personas, tiene un nombre muy determinado en una negociación: chantaje", ha sentenciado Chaves, según Europa Press, al aludir también a José Antonio Griñán. El expresidente andaluz ha hecho estas declaraciones a los periodistas en el Senado.