Borrar
CostadelSol

Fuengirola se resiste a renunciar a la Isla del Sol pese a su exclusión en el PGOU

El proyecto, que no pasó el corte del estudio de impacto ambiental, prevé ganarle al mar cien mil metros cuadrados para un complejo de ocio

FRANCISCO JIMÉNEZ

Sábado, 30 de enero 2010, 02:37

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Isla del Sol estaba llamada a ser el proyecto estrella del ocio en Fuengirola, un gran complejo recreativo, cultural y deportivo que ocuparía una superficie de cien mil metros cuadrados ganada al mar. Sin embargo, esta ambiciosa aspiración municipal pronto sufrió un varapalo en forma de declaración de impacto ambiental negativa, debido al daño que podría causar a las playas de Los Boliches. La consecuencia no se hizo esperar. El proyecto desapareció del nuevo PGOU, aprobado ayer de forma provisional una vez incorporados los informes sectoriales, tal y como avanzó SUR el jueves.

Pese a la exclusión de esta iniciativa, en el Ayuntamiento siguen sin darse por vencidos. «No renunciamos a la Isla del Sol, a pesar de su retirada. Aspiramos a que pueda ser una realidad y, si en el futuro es así, incluiremos el proyecto en el PGOU a través de una modificación de elementos». Así lo aseguró ayer la edil de Urbanismo, Ana Mula, durante el debate plenario en el que el equipo de gobierno del PP hizo valer su mayoría (PSOE y PA votaron en contra) para salvar el último trámite municipal previo al envío del Plan General a la Delegación Provincial de Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta, órgano al que compete la aprobación definitiva del expediente. Tras casi seis años de trámites, en el Consistorio no están dispuestos a perder más tiempo, de ahí que los técnicos lleven días trabajando a marchas forzadas para enviar el expediente la próxima semana. En cuanto la administración autonómica compruebe que está todo, empezará a contar el plazo de cinco meses en el que deberá pronunciarse.

«La aprobación del PGOU es un gran paso para el desarrollo y el progreso de Fuengirola, con un modelo de ciudad basado en la mejora de los servicios y equipamientos públicos», afirmó una «satisfecha» Esperanza Oña. La alcaldesa hizo referencia a la «desidia y falta de respuesta» de los organismos responsables de emitir los informes sectoriales (Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, y la Agencia Andaluza del Agua, por parte de la Junta; y Adif, Carreteras y Costas, del Gobierno central), sin los que el PGOU no podía continuar su tramitación.

En cuanto a la oposición, el PSOE puso en duda la capacidad de la ciudad para soportar que su población se duplique hasta los 140.000 habitantes en ocho años (la previsión va más allá y habla de entre 205.000 y 247.000 habitantes en el año 2025) tanto en densidad como en tráfico, aspecto en el que los problemas son ya patentes. «Fuengirola va a tener una densidad de población mayor que Tokio», comentó su portavoz, Javier García León. Por su parte, el andalucista Cristóbal González aseguró estar de acuerdo con «el 80% del texto», aunque puso reparos en cuestiones como la edificabilidad en algunos convenios o la «concentración» de VPO en la finca La Rosaleda (al norte de Las Salinas).

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios