Ivesur reconduce sus estaciones ITV hacia los países en desarrollo

Esta progresiva implantación de las inspecciones técnicas en países en vías de desarrollo es precisamente el nicho de mercado que ha encontrado la compañía malagueña Ivesur para reconducir su negocio a partir de que la Junta de Andalucía decidiese en 2007 retirarle las seis concesiones de ITV que mantenía en la región.

El gobierno autónomo, a través de la Consejería de Innovación, optó entonces por cambiar el modelo de gestión de estos centros de inspección de vehículos, que pasaron a depender directamente de la Junta a través de la empresa pública Veiasa. Ante esta tesitura, y tras veinte años de experiencia en el sector, los responsables de Ivesur se aplicaron el refrán «Hacer de la necesidad virtud» y ampliaron su horizonte empresarial, fijando sus ojos en aquellos países en los que progresivamente se van generalizando las revisiones obligatorias de vehículos.

Así, en los últimos cuatro años la empresa ha conseguido expandirse por Sudamérica a día de hoy tiene seis estaciones en Colombia, tres en Panamá, una en Paraguay, una en Brasil y una en Perú, y por Europa del Este cuenta con tres centros de ITV en la República Checa, en un proceso que está en pleno desarrollo. «Estamos en negociaciones para tratar de conseguir nuevas concesiones en Ecuador, Bolivia, México y Venezuela», comenta el director de operaciones de Ivesur, Jesús Vargas.

Nuevos objetivos

Paralelamente, la compañía está analizando las posibilidades de introducirse también en países del norte de África, como Argelia y Marruecos; así como en Rumanía, Hungría y Eslovaquia. «Buscamos todas las posibilidades de crecimiento en estos países en los que las inspecciones de vehículos se están haciendo obligatorias en los últimos años», argumenta Vargas.

Una de las claves que explican el atractivo de los países en vías de desarrollo para Ivesur es el rápido aumento de su parque móvil, que crece a un ritmo del 7% anual. Pero Jesús Vargas también es consciente de la importancia del mercado español, por lo que considera «fundamental» mantener la última estación de ITV que tiene en Andalucía, concretamente en Algeciras (Cádiz). La concesión de la Junta expirará en septiembre de 2010, pero Vargas confía en que en este caso no se repita lo ocurrido en el resto de las provincias, con la retirada de las concesiones y la gestión pública de estos centros. Algo que, para Ivesur, va contra corriente.

«El caso de Andalucía es excepcional en el conjunto del país, sólo ocurre lo mismo en Extremadura y Asturias. La tendencia es hacia un modelo de concesiones o, incluso, de un mercado libre por medio de autorizaciones», argumenta el responsable de Ivesur, quien explica que su compañía no ha desechado la opción de expandirse por España, aunque reconoce que hay dificultades debido a la gran competencia existente en este sector. «Están pendientes de modificarse las normativas en Madrid y Cataluña, que parece que van a ir hacia un modelo de autorizaciones, por lo que estamos viendo nuestras posibilidades», añade. De momento, además de la estación de Algeciras, Ivesur cuenta con otra en Melilla, operativa desde el año pasado en régimen de concesión.

En el proceso de expansión y diversificación internacional de su negocio, Ivesur ha invertido ya alrededor de 30 millones de euros, y aún cuenta con una cartera de negocio de unos 10 millones más.

Objetivo: 700.000 coches

En este camino, Jesús Vargas destaca el apoyo que ha recibido su empresa de organismos como la Agencia de Promoción Exterior de la Junta de Andalucía, el Instituto de Crédito Oficial, el Instituto de Comercio Exterior o el Cofidex. Incluso el ex presidente de la Junta, Manuel Chaves, asistió a la inauguración de una de sus nuevas estaciones en Colombia el pasado año.

Ivesur, que cuenta ya con 180 empleados y prevé cerrar este ejercicio con una facturación de 10 millones de euros, espera recuperar en 2011 la cifra de 700.000 vehículos inspeccionados que tenía en 2007. La empresa nació a principios de los años 80 en Málaga de la mano de Talleres Álvarez, y en 1985 ya se había hecho con las seis estaciones de ITV de Málaga y Sevilla.