Un intento de atraco desencadenó el crimen de la calle Pacífico

El subdelegado del Gobierno en Málaga, Hilario López Luna, informó ayer de que el fallecido al parecer entró con un arma blanca en un salón de juego -La Esquina, situado en el cruce entre las calles La Hoz y Arganda, en Huelin- y protagonizó un «intento fallido de robo», precisó.

El atraco frustrado al que hizo referencia López Luna sucedió minutos antes de las once de la noche, al término de la final de Champions que enfrentaba al Fútbol Club Barcelona con el Manchester United. Según fuentes cercanas al caso, un encapuchado armado con un cuchillo irrumpió en el local, donde encontró a un cliente sentado.

Justo en ese momento salió del aseo el único empleado que había en esos momentos en el salón de juegos. Todo parece indicar que cogió desprevenido al supuesto asaltante, que tiró el cuchillo y salió corriendo, según la fuente. Este periódico intentó recabar ayer la versión del establecimiento, que rehusó hacer declaraciones.

Siguiente esta tesis de la investigación a la que ha tenido acceso este periódico, el trabajador lo siguió hasta la puerta y, al verlo alejarse, gritó: «¡Al ladrón!». La calle estaba más concurrida de lo habitual a esa hora debido a los festejos por el triunfo blaugrana. Unos jóvenes salieron tras el sospechoso. A este grupo se unieron sobre la marcha dos personas, que al parecer fueron las causantes de las lesiones, según el subdelegado.

La persecución apenas duró unos minutos. A unos 600 metros del lugar donde se produjo el intento de robo, el hombre fue abatido supuestamente por un adoquín lanzado por uno de los agresores. El objeto le golpeó en la cabeza y M. B. R. cayó al suelo.

Fuentes próximas a la investigación indicaron que la baldosa le causó una gravísima herida en el cráneo, aunque, al parecer, luego lo remataron en el suelo empleado objetos contundentes, «como un martillo, piedras o adoquines», añadió López Luna. No en vano, aparecieron varios fragmentos de baldosas junto al cadáver.

Un testigo presencial explicó ayer a la Cadena Ser que vio cómo cuatro personas golpeaban a la víctima, que yacía en el suelo. En un momento de la agresión, tres de ellos salieron corriendo y el cuarto, que se quedó rezagado, supuestamente lo remató con un martillo, según declaró el testigo. Entre tanto, escuchó cómo las tres personas que huían del lugar proferían insultos al hombre.

Descripción física

Cuando los servicios de emergencias y la policía llegaron al lugar de los hechos, la víctima ya había muerto. Los agentes comprobaron que su descripción física se parecía a la del autor del intento de robo, lo que avaló la hipótesis de que podía tratarse de la misma persona. No obstante, el fallecido, que es español, carece de antecedentes.

La investigación se desarrolló en un tiempo récord. En cuestión de horas, los agentes del Grupo de Homicidios identificaron a dos sospechosos y difundieron sus nombres. Ayer por la mañana, una patrulla de paisano de la Jefatura de Carretera de Cádiz detuvo a uno de ellos, un joven magrebí que vive en Huelin y que al parecer ejerce de aparcacoches en la zona.

Poco después, agentes de la Policía Nacional arrestó al segundo individuo, de la misma procedencia. Ambos están detenidos por su presunta vinculación con los hechos y ayer permanecían en comisaría a la espera de pasar a disposición judicial. No se descartan nuevos arrestos.