Los Ultras Sur arropan a Calderón
El presidente del Real Madrid saca adelante la asamblea con el apoyo de los radicales, que insultaron a todos los que discreparon
AMADOR GÓMEZ
Lunes, 8 de diciembre 2008, 03:48
Ramón Calderón superó ayer su asamblea más comprometida y también la más tensa y desagradable. Obtuvo el respaldo de los compromisarios a las cuentas ... del club por un estrecho margen (el 55% de quienes ejercieron su derecho al voto), durante una cita polémica en la que contó con el apoyo de los Ultras Sur. Los aficionados radicales del Madrid ya habían anunciado su intención de acudir a la asamblea para apoyar a Calderón, a quien jalearon mientras abucheaban e insultaban a los opositores a la actual junta directiva. Gran parte de la asamblea pidió a gritos la dimisión del presidente en diversos momentos, pero Calderón encontró las voces de ánimo de más de medio centenar de 'ultras' y de otros socios no compromisarios para acallar a los detractores.
A los compromisarios que discreparon de la gestión de Calderón se les interrumpió constantemente y a algunos de ellos se les cortó incluso el micrófono. Calderón intentó cerrar el turno de ruegos y preguntas y la asamblea reaccionó con silbidos, a los que respondieron los 'ultras' con gritos de «¡Presidente, presidente!» y la oposición con los de «¡Dimisión, dimisión!». Los Ultras Sur llegaron a gritar «¡Madridistas, hijos de puta!» durante uno de los momentos de mayor tensión, y algún compromisario ofendido rompió sus papeles y abandonó el Palacio de Congresos, donde se demostró la gran división que existe entre el madridismo.
A pesar del resultado de las votaciones, la asamblea no dejó satisfecho al presidente. «A mí tampoco me ha agradado el espectáculo poco ejemplar que hemos dado», declaró Calderón después de más de seis horas de reunión. Al menos, en un periodo tan convulso para el máximo dirigente blanco, Calderón vio cómo la asamblea aprobaba las cuentas del pasado ejercicio (con una deuda oficial de 199 millones de euros y un beneficio de 51 millones) por 603 votos a favor, 442 en contra y 52 abstenciones.
Escaso margen
De los 2.100 compromisarios del club, acudieron 1.215, y en el momento de la votación de las cuentas, que se realizó a mano alzada, pese a que algunos pidieron urnas, fueron pocos los que se ausentaron, ya que se pronunciaron 1.097 socios. El presupuesto para la presente temporada (400 millones), sin embargo, sólo fue aprobado por 47 votos de diferencia. «Si alguien critica la solvencia del Real Madrid, o no entiende de economía o tiene mala fe», proclamó Calderón antes de someter a votación las cuentas de pérdidas y ganancias de una entidad que según la 'Plataforma Blanca' que preside Eugenio Martínez tiene una deuda de 511 millones. «Es un disparate decir que la deuda es de 500 millones. Si alguien es capaz de demostrar que estoy equivocado con estos números, dimitiré. El Real Madrid es quizás, patrimonialmente, el club más sólido del mundo», apuntó el vicepresidente económico, José Ignacio Rivero, también abucheado.
Tampoco faltó el compromisario que desde el atril acusó a Calderón y su directiva de convocar una asamblea, «en medio de un puente, para fastidiar», ni conocidos afines al presidente, caso de Toñín 'el torero', que dijo estar muy contento porque con esta directiva nunca le habían «tocado el bolsillo».
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