Detenido un menor por pegarle a un vecino que le recriminó por fumar porros

Los hechos sucedieron a finales de la semana pasada en las inmediaciones de la avenida Arroyo de los Ángeles, frente a la comandancia de la Guardia Civil. El joven se encontraba con un familiar charlando en la puerta de un bloque de pisos cuando llegó un vecino y lo sorprendió fumándose un canuto. El hombre le regañó por lo que estaba haciendo y, al parecer, el menor reaccionó emprendiéndola a golpes con él. Fuentes cercanas al caso explicaron que le propinó puñetazos y patadas.

Otro vecino de la zona, alarmado por la trifulca, telefoneó a la sala del 092 de la Policía Local, que envió a una patrulla para disolver la pelea. De hecho, el adolescente habría arremetido contra la víctima incluso delante de los agentes, según las fuentes consultadas.

Puesto en libertad

Los policías locales se llevaron detenido al menor, que pasó inmediatamente a disposición de la Fiscalía de Menores de Málaga. Un representante del Ministerio Público decidió que fuese puesto en libertad y que se le entregara a sus padres a la espera de ser citado. Las fuentes precisaron que el joven ya ha sido arrestado anteriormente en varias ocasiones.

La víctima, por su parte, presentó contusiones leves como consecuencia de la agresión sufrida.

A finales del pasado año, las drogas estuvieron de telón de fondo en otro caso de violencia protagonizado por un menor de edad. Entonces, un joven de 17 años fue detenido en Málaga capital acusado de pegarle a su progenitora porque le tiró a la basura una maceta de marihuana que tenía en casa, según confirmaron a este periódico fuentes cercanas al caso. El adolescente reaccionó destrozando el mobiliario y, a continuación, le dio un fuerte empujón a su madre, que cayó de cabeza sobre la puerta de la terraza, rompiendo el cristal de la misma, según las fuentes.

Los hechos ocurrieron sobre las 21.00 horas del lunes 17 de diciembre en una vivienda situada en los alrededores de la calle Eugenio Gross. Alarmado por los gritos que procedían de la casa, un vecino telefoneó a la sala del 092 de la Policía Local para avisar de que se estaba produciendo una pelea.

Los primeros agentes llegaron en unos minutos y llamaron a la puerta de la vivienda. Les abrió una mujer visiblemente nerviosa que les manifestó que estaba sufriendo una crisis de ansiedad y que necesitaba asistencia médica.