Agustín Moreno Muñoz, ex alcalde de Mijas: De alcalde a médico sin salir del Ayuntamiento

Moreno nació en Antequera el 27 de mayo de 1957. En la década de los 80 se trasladó a Mijas con su mujer y sus tres hijos y quedó maravillado por este pueblo en el que estableció su residencia. Licenciado en Medicina y ginecólogo de profesión, su trayectoria política se inició hace 20 años, cuando entró a formar parte de las filas socialistas mijeñas. En 1995 entró como número dos, detrás de Antonio Maldonado, su antecesor y posterior rival. Fue responsable de las concejalías de Urbanismo y Sanidad y teniente de alcalde, hasta que en 1996 tomó el testigo del primer edil porque Maldonado dejó el cargo para trasladarse a China y trabajar en el sector privado.

Las relaciones con su antecesor se enfriaron y, a principios de la década actual, el enfrentamiento entre ambos se hizo patente. En 2002, Maldonado renunció a la secretaría mijeña del PSOE ante la negativa de la ejecutiva local a celebrar elecciones primarias para los comicios municipales de 2003. Agustín Moreno asumió entonces el puesto de secretario y se postuló como candidato. Por su parte, Maldonado abandonó las filas del PSOE y creó un partido independiente que fue rival de Moreno en las urnas. La formación de Maldonado, que fue alcalde de Mijas desde 1979 a 1997, únicamente logró dos concejales en la corporación municipal.

Moreno emprendió un nuevo mandato al frente de la Alcaldía mijeña en 2003 con mayoría absoluta y un concejal más. Protagonizó entonces un episodio que ha marcado su perfil político. El pleno municipal aprobó la inclusión del propio alcalde en la lista provisional de admitidos al proceso de 'funcionarización' iniciado ese año y destinado a los trabajadores fijos del Consistorio que ejercen labores de funcionarios desde antes de 1988. Se creó entonces una nueva plaza, la de jefe de Servicio Social y de Sanidad, la de mayor dotación del Consistorio y ajustada al milímetro al perfil de Moreno. Nadie concurrió a ella, salvo él. En julio de 2004, el alcalde logró la plaza con una calificación media de notable. Ningún profesional la ha ocupado desde entonces, aunque su dotación salarial ha ido en aumento. En abril del año pasado, el ex alcalde aprobó la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Consistorio para 2006 sin el consenso de los sindicatos. En esa RPT, el puesto de jefe de Servicios Sociales y Sanidad registra un incremento salarial de 19.157 euros que duplica la retribución establecida hasta entonces. Los 18.193 euros de la RPT aprobada en 2005 se convierten en 37.350 euros, que harán que Moreno gane al menos 3.112 euros al mes. Fuentes del Partido Popular de Mijas aseguraron a este periódico que el salario de la plaza volvió a ser incrementado con posterioridad hasta el punto de que Agustín Moreno podría percibir unos seis mil euros mensuales en su nuevo puesto como médico municipal.

Este polémico cambio de trabajo sin salir del Ayuntamiento ha estado a punto de sentar a Moreno ante un tribunal. Antonio Maldonado le denunció en los juzgados por este asunto en noviembre de 2004 y, desde entonces, el juicio ha sido aplazado dos veces. La primera, en noviembre de 2005 por incomparecencia del denunciado, y la segunda, en abril del año pasado debido a un recurso de los abogados del ex alcalde, que logró suspender la vista.

Pero no ha sido este el único asunto que ha motivado la acción de la Justicia para indagar sobre la gestión de Agustín Moreno en Mijas. El mes pasado se dio a conocer que el Juzgado de Instrucción número 3 de Fuengirola había abierto diligencias para investigar un presunto delito urbanístico en una promoción de viviendas protegidas (VPO) del Ayuntamiento de Mijas que se ubica supuestamente en una vía pecuaria, que es de dominio público. Y todo esto en un municipio que, en los últimos años, se ha caracterizado por su elevado protagonismo en el desarrollo residencial de la provincia. Desde 2001, se han iniciado cerca de 29.000 viviendas. Es, sin lugar a dudas, el municipio gobernado por los socialistas que se aleja más del desarrollo sostenible que se defiende desde sus filas.