Monólogos de la Ciudad
El Debate de la Marmota sobre el Estado de la Ciudad debió grabarse en 2003 y reproducir cada año la cinta
TEODORO LEÓN GROSS
Viernes, 6 de diciembre 2013, 03:04
El alcalde ha ganado el Debate sobre el Estado de la Ciudad. Esta frase, conviene aclararlo, fue escrita antes de que se celebrara el Debate. ... Qué más da. En España no se estila eso de esperar a tener elementos de juicio para sacar las conclusiones, ¡mejor un buen pre-juicio! Como aquel crítico literario al que le reprocharon que escribiese comentarios sobre libros sin leérselos siquiera: «Es para no dejarme influir». Eso encaja bien en la ética nacional. Pero esta vez no se trata de eso. Simplemente el Debate de este año sólo podía ser como el Debate de los nueve años anteriores. Al final sucede como con la Semana Santa: gran expectación, clima de hito excepcional, pero siempre desfilan las mismas cofradías, hacen el mismo recorrido, van con los mismos colores, regresan al mismo templo. El Cautivo es el Cautivo; la Esperanza es la Esperanza; Servitas es Servitas, y el Debate es el Debate.
- Discurso del alcalde: Málaga va bien. Aunque haya ochenta mil parados o huelga de basura, Málaga siempre va bien. Las pruebas para demostrarlo a veces son extrañas. Ayer, por ejemplo, la Ley Wert. Capítulo de éxitos: Samsung. Qué cosas.
- Discurso de la portavoz del PSOE: Málaga va mal. «La ciudad está en estado de shock». Y ya todo eso. Se queja de una política «muy de derechas», obviando el pequeño detalle de que eso es lo que ha votado la mayoría ya en cinco elecciones.
- Discurso del portavoz de IU: Málaga va muy mal. «Una situación de emergencia social». Entre las críticas letales: acusar a De la Torre de ir muy con el PP. Otro palo.
- Discurso del portavoz del PP: Que no, que Málaga va muy bien. Y el PP también va muy bien; no como el PSOE e IU, que van muy mal porque no hacen oposición constructiva. También algo de Junta caca culo pedo pis. Esas cosas.
El Debate de la Marmota sobre el Estado de la Ciudad debió haberse grabado en 2003 y reproducir cada año la cinta. Es poco probable que nadie notase el cambio de Marisa Bustinduy por María Gámez, con esas gafas tan de la familia; y De la Torre parece llevar siempre la misma corbata, que seguramente se guarda todo el año en la carpeta 'Debate sobre el Estado de la Ciudad' junto a su discurso. Al final, claro, el resultado es el mismo. Es como aquello que decía Lineker del fútbol -un juego de once contra once y gana Alemania- pero en versión Casona: un duelo de portavoces y gana De la Torre. Seguramente ya era así en anteriores reencarnaciones, y con la misma corbata. Absurdamente a esto lo llaman Debate sobre el Estado de la Ciudad cuando son Monólogos de la Ciudad. Lo lógico, como en el Club de la Comedia, sería que el público votase el premio al mejor. En fin, cae el otoño, llega el frío, aparecen las castañas, se deshojan los árboles y De la Torre gana el Debate. El ciclo maravilloso de la naturaleza en Málaga.
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