Los etarras juzgados en París dicen que no pararán hasta que el País Vasco «sea libre»

«Somos militantes de ETA y lucharemos hasta que nuestro país, Euskal Herria, sea libre», dijo Barandalla en nombre propio y de sus compañeros de banquillo. En un texto leído en francés, para ejercer el derecho a la última palabra ante un tribunal que dijeron no reconocer, culparon a las autoridades españolas y galas de ser «responsables por vuestra colonización e imposición de la sublevación armada de nuestro pueblo». Tras denunciar la muerte en Toulouse del etarra Jon Anza y la política penitenciaria de «exterminio» en las cárceles galas, en el escrito se responsabiliza a Francia y España del conflicto vasco y se advierte de que ambos estados «si siguen con la represión tendrán enfrente a los militantes de ETA». El discurso concluyó con la afirmación de que «la solución está en el diálogo y la negociación». Las referencias al cese de los atentados y la mediación internacional, obviadas en el manifiesto de los acusados, fueron esgrimidas previamente por su abogada.