«La temporada es de notable, pero vamos a por el sobresaliente»

Con alguna pequeña disparidad de opiniones con respecto a la nota numérica, los futbolistas coinciden en que la temporada del Málaga es de notable. Para Álex Pastor, la temporada del cuadro malaguista es de «8, notable, pero creo hay que ser ambiciosos e ir a por el 10, el sobresaliente, que seguramente el año que viene o en los próximos lo vamos a conseguir». «Yo le doy un 7», dice Galilea, que considera que «el equipo ha cumplido el objetivo, estamos satisfechos con el trabajo que hemos hecho». Alfonso Herrero reconoce que «hemos tenido momentos buenos y otros peores, pero siendo el primer año después del ascenso, le doy un 7,5. Creo que ha sido una temporada en la que hemos conseguido una estabilidad para poner las bases del Málaga del futuro».

Murillo, muy exigente consigo mismo, se pone un suficiente bajo, aunque también saca pecho y opina que se ha ganado un puesto en estas últimas semanas, pero sabe que en el fútbol «cada temporada se renueva todo».

La visión de los jugadores con respecto al proyecto de Loren Juarros, fundamentado en el talento de la cantera, es muy positiva. Álex Pastor alaba la apuesta de director deportivo, manifestando que «es muy bueno que se cuente tanto con los jóvenes en este club, nos han ayudado mucho cuando les ha tocado subir y sienten mucho el escudo». Herrero dice que lo que está llevando a cabo ahora Juarros fue lo que le convenció para firmar en su momento y que se siente representado. Larrubia expresa que esta filosofía ya está dando resultado.

Las principales diferencias que destacan los jugadores con el salto de categoría son: la superior calidad futbolística en Segunda División, una competición que «admite menos errores» según comentan Herrero y Nelson, en la que «hay menos tiempo para pensar porque el fútbol va a otra velocidad» como dice Larrubia, o la magnitud de los estadios que visitan, aunque también señalan que La Rosaleda y la afición malaguista ha sido un factor diferencial como fuente consistente de puntos a lo largo de toda la temporada.

Si bien es cierto que el Málaga obtuvo la permanencia con dos jornadas de margen, el conjunto dirigido por Sergio Pellicer sufrió una sensible caída en su rendimiento durante la segunda vuelta y vio de cerca el peligro. En el vestuario no se temió en ningún momento por la permanencia, pero Pastor admite que el vestuario no estaba del todo tranquilo. Nelson entendía la preocupación de un sector de la afición porque «estamos hablando de un club tan grande como es el Málaga». Los jugadores afirman que en este segundo tramo al equipo le faltó esa dosis de fortuna en los últimos minutos de algunos choques.

El vestuario del Málaga mezcla la cautela y la ambición con respecto a qué debe aspirar el cuadro de Martiricos la próxima temporada, en la que el conjunto blanquiazul debe evidenciar una mejoría global y luchar por cotas más altas que las que se marcaron para la campaña que ahora acaba.

Herrero, persona con mucha experiencia en el mundo del fútbol, prefiere esperar a que empiece la campaña, conocer la situación general del club y la plantilla que habrá antes de fijar una meta concreta. Larrubia sigue una línea similar a la del portero, pero añade que «el club y todos los jugadores que estemos debemos dar un pasito hacia delante y mejorar cada año». Nelson eleva ligeramente la apuesta: «Por la grandeza que tiene este club, sabemos que debe estar en Primera, pero tenemos que esperar a que el club nos diga lo que nos vamos a proponer la próxima temporada». Para Álex Pastor, el Málaga posee los mimbres como para hacer una gran temporada y estar arriba. No obstante, también cree que hay que ir poco a poco.