El Frente Bokerón vuelve a reclamar al Málaga la readmisión de sus miembros vetados

Se refieren a los 18 aficionados vetados de forma cautelar por la entidad, que el verano pasado prohibió a estos abonarse en base a que están acusados por su supuesta participación en los altercados que se produjeron en el último partido de la temporada en los aledaños del estadio malaguista. El Frente Bokerón considera que es una medida que «vulnera el derecho a la presunción de inocencia».

Pero el Málaga, que está personado como acusación particular junto a LaLiga en la causa judicial abierta contra estas 18 personas, argumenta que sólo ha cumplido con la Ley del Deporte y que hay que esperar una sentencia para reconsiderar la situación. Por lo pronto, sobre este procedimiento, el juzgado de instrucción número 4 de Málaga emitió recientemente un auto para la apertura de un juicio oral, según pudo conocer este periódico.

Por este y otros motivos, el Frente Bokerón viene criticando duramente la gestión del administrador del Málaga, José María Muñoz, sobre el que pidió la dimisión en el último partido en La Rosaleda y al que define como «dictador judicial» en su último comunicado, donde también lamentan que el pasado domingo el club «intentó silenciarnos a través de mensajes de advertencia contra cánticos violentos, aunque cabe destacar que ninguno de nuestros cánticos ni pancartas contenían insultos o incitaban a la violencia».

«Queremos recalcar que continuaremos expresando nuestras protestas de manera respetuosa dentro del campo hacia José María Muñoz en cada partido, tal y como lo hicimos ayer (por el domingo)», concluye el Frente Bokerón en su publicación, donde relata que el administrador «es una persona soberbia [...] con una tendencia codiciosa [...] un comportamiento traicionero [...] y una marcada gula por el dominio absoluto».

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