La titular del Juzgado de Instrucción número 9 de la capital ha tumbado el recurso presentado por la defensa de David Serrano, el dueño de la finca de Totalán donde el pequeño Julen murió tras caer al interior de un pozo. Los abogados de Serrano, único investigado en esta causa por un supuesto delito de homicidio por imprudencia, pidieron a la jueza que reconsiderase su postura y admitiera las pruebas que proponen para aclarar si, como sostienen, la piqueta pudo ser la causa de la muerte del niño.
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Entre otros aspectos, la magistrada argumenta en el auto, al igual que viene haciendo desde un primer momento, que aún quedan por conocerse pruebas periciales sobre este caso, algunas de «extraordinaria importancia», como es el informe definitivo de la autopsia.
La jueza ya ha tomado una decisión manteniendo su criterio, que también es el del fiscal y el de los padres de Julen, por lo que ahora será la Audiencia Provincial la que tenga la ultima palabra sobre el recurso, ya que los letrados no sólo recurrieron en reforma, sino también en apelación.
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