Encarnación Cantero, pregonera del Carnaval de MArbella 2010: «El Carnaval es un auténtico desahogo, sobre todo ahora con la crisis»

El honor de pregonar el Carnaval de Marbella le corresponde este año (sábado 6 de febrero, a las 21.00 horas, en el Palacio de Congresos) a Encarnación Cantero, la presidenta del centro de mayores desde hace cinco años y otros cuatro como vicepresidenta. Una experiencia que estuvo a punto de vivir en 2009, cuando los responsables de la Asociación Cultural Carnavalesca ya habían pensado en ella para recitar las excelencias de esta fiesta popular. Asume encantada el reto, pero también reconoce que le provoca un poco de respeto porque sabe que se dirigirá a mucha gente. «Me hace mucha ilusión ser pregonera y sobre todo del Carnaval», asegura. Una fiesta que según ella es un «auténtico desahogo», sobre todo en tiempos de crisis como los que vivimos.

-¿Cuándo se enteró de que iba a ser la pregonera del Carnaval 2010?

-No sabía nada. Me lo dijeron un par de días antes de la presentación de la fiesta (el pasado miércoles). El presidente de la Asociación Cultural Carnavalesca (Francisco Román) me comentó que ya me tenía en mente para haber sido pregonera hace un año, pero que al final por circunstancias no pudo ser.

-¿Qué significa para usted?

-Mucho, sin duda. Me encanta el Carnaval; bueno, todo lo que sea arte en general me entusiasma. Para mí significa una alegría tremenda, pero también tengo que reconocer que me provoca un poco de respeto porque no sé si estaré a la altura (risas). Estoy muy honrada y haré todo lo posible para que salga lo mejor que pueda. Es un honor ser pregonera y sobre todo del Carnaval. Pero también pienso que es un homenaje en vida, que es cómo tiene que hacerse.

-¿Cómo vive usted el Carnaval?

-A tope en todos los sentidos. No ahora, sino desde hace mucho. Ya incluso cuando estaba en el colegio participaba en todos los preparativos posibles con los profesores y el resto de alumnos. Es que la afición me viene de lejos y con el paso del tiempo fue creciendo.

-¿Y cómo lo viven los mayores en el centro que preside?

-Hacemos de todo. Tenga en cuenta que somos más de 4.700 socios. Y la mayoría sale a la calle, ya sea participando directamente o bien contemplando lo que allí sucede. Salimos a la calle casi todos los días. Dentro del centro hacemos concurso de disfraces, bailes y todo tipo de juegos. A los mayores les gusta participar en todo esto, la verdad. En cualquier caso, yo pongo también mucho de mi parte para que todo el mundo participe en esta fiesta tan popular. Y no este año porque he sido elegida pregonera, sino que de siempre he sentido la necesidad de impulsar la participación de todo el mundo, ya desde que estaba en el colegio.

-¿Por qué cree que el pueblo tiene que participar en el Carnaval?

-Sinceramente, quien no lo haga se está perdiendo una cosa muy grande, muy bonita, que además está muy arraigada al pueblo. Si tuviera que definir el Carnaval diría que es un desahogo porque uno puede expresar lo que siente a través de las canciones o a través de cualquier otra vía. Te diviertes, ríes, sientes muchas cosas a la vez en un clima de máxima cordialidad. Es una explosión de alegría. Yo lo que pido es que todo el mundo se una porque Marbella en sí se tira a la calle estos días.

-¿Es compatible esa explosión de alegría con el sentimiento general de tristeza y desencanto que se vive por culpa de la crisis?

-Es compatible, claro que sí, faltaría más. Estoy convencida de que cuanto más piense uno en lo malo, más se magnifica. Igualmente que estoy convencida de que de esta crisis salimos. Yo ya viví unas cuantas parecidas y al final, antes o después, se sale. Como yo digo a la hora de brindar: '¡Arriba, abajo y las penas al carajo!'. Hay que ser muy positivo en todas las cosas de la vida, la verdad, y ponerles un poco de alegría y sentido del humor. Y el Carnaval es para eso, para alejarse de las preocupaciones durante un buen rato.

-Por cierto, ¿cómo lleva el pregón?

-Todavía no empecé. Como le dije, me enteré hace poco de que lo iba a dar por lo que tampoco he tenido mucho tiempo para pararme a pensar, aunque sí que ya hice un par de consultas. Pero bueno, quiero hacer una cosa cortita y simpática a la vez, como tiene que ser cuando se trata del Carnaval. No muy pesado porque al final la gente se termina aburriendo. A todos nos ha pasado alguna vez que si la cosa se prolonga más de la cuenta, se pierde la atención y la cosa queda en nada.

-¿Tiene pensado ya el elemento central del mismo?

-Quiero que la gente me conozca un poco más. Hablaré de mi persona, de esa experiencia que le hablé, pero también será una llamada a la participación, como también le he comentado. También seré agradecida con las personas que me eligieron, gente que trabaja y se implica muchísimo en todas estas cosas sin apenas recursos. Digamos que son los grandes protagonistas de la fiesta porque la hacen posible.