Dynamo: «Mi primer truco fue para quitarme unos matones de encima»

Sudadera con capucha, zapatillas deportivas y figura desgarbada. El aspecto de Steve Frayne (Bradford, Inglaterra, 1982) es el de un joven normal y corriente del extrarradio londinense. Pero al igual que Clark Kent (Superman) o Peter Parker (Spiderman), cuando se transforma en su alter ego, Dynamo, es capaz de hacer cosas extraordinarias como caminar sobre las aguas del Támesis, atravesar los cristales blindados de una joyería o subir los datos de audiencia de Discovery Max (los viernes, a las 22.30 horas) hasta el 4% del 'share'. ¿Sería capaz de acabar con la crisis? «Estoy en ello». - ¡Voy a dedicarme a la magia! ¿Cuándo se decide eso? - La magia empezó a interesarme desde muy pequeño, pero decidí que me iba dedicar profesionalmente a esto más o menos a los quince años y dejé el colegio. Por supuesto mi familia me presionó para que estudiara en la Universidad, pero decidí que mi afición se convertiría en mi medio para ganarme la vida y opté por la magia... ¡y aquí estoy! - ¿Por qué el nombre Dynamo? - Viene de una actuación que hicimos varios magos en 2001, en Nueva York, para homenajear al gran Houdini. Cuando estaba haciendo mi número una persona del público me gritó emocionada «¡este tío es una dinamo!» (Expresión que en España equivaldría a «es una máquina»). El nombre se me quedó y a la hora de decidirme por uno escogí Dynamo. - ¿Salió todo bien en su primera actuación? - Las primeras veces no fueron espectáculos, sino más bien para quitarme de encima a unos matones que no paraban de molestarme en el instituto (risas). Mi primera actuación formal fue cuando tenía doce años, en la función de Navidad, y no es que saliera todo como estaba previsto, pero tampoco fue un desastre. - ¿De quién aprendió sus primeros trucos? - De mi abuelo, él no fue profesional, pero era un mago muy bueno. Es la persona más increíble que he conocido y sin su ayuda nunca habría llegado tan alto. - Con los efectos especiales actuales, ¿es más difícil sorprender al público? - Evidentemente esto ha hecho que la gente sea más escéptica. Cuando veo una película que tiene efectos especiales, lo que pienso es 'mira, esto me puede servir de inspiración para mi próximo número'. En el programa intentamos situar todas las cámaras para que el número se vea de la forma más natural y espontánea, como ha sido siempre. - Para caminar sobre el agua habrá entrenado mucho... - Ya no entreno tanto, ahora sobre todo me dedico a hacer muchas actuaciones, también en la calle. Yo soy mago veinticuatro horas al día, siete días a la semana. - ¿No podría hacer algún truco para acabar con la crisis? - (Risas) Estoy en ello, es difícil, pero parece que la cosa va mejorando por sí sola. - ¿Ha pensado ya en cuál sería su 'Truco Final'? - Tendréis que esperar para verlo, no ha llegado el momento aún.