Borrar
Guillermo Ramos es bisnieto de Manuel Avilés Giráldez: SUR
Mantecados con un siglo de historia
UNA VIDA CON SUR. 75 ANIVERSARIO

Mantecados con un siglo de historia

La Antequerana Fundada en 1888

CARMEN MARTÍN

Domingo, 4 de noviembre 2012, 15:12

En la calle Merecillas de Antequera parece que siempre es Navidad. Los escaparates de La Antequerana llenos de mantecados y de cajas de surtidos abren el apetito a cualquiera y antequeranos y visitantes se afanan ya por llenar la alacena con polvorones, roscos y alfajores de la fábrica de mantecados más antigua de la ciudad. Fue en 1888 cuando la fundó Manuel Avilés Giráldez y más de un siglo después, tras haber pasado de generación en generación por vía materna, es su bisnieto Guillermo Ramos quien la dirige.

Pero entre uno y otro ocurrieron muchas cosas en La Antequerana. Tras Manuel, su yerno Juan Pérez de Guzmán, tomó el testigo y posteriormente su nieta Isabel Pérez Avilés, la madre de Guillermo, cogió las riendas de la empresa familiar. Fue Juan Pérez de Guzmán el que quiso mantener el nombre del fundador, de ahí que la empresa se llame ahora Mantecados La Antequerana - Sucesores de Manuel Avilés.

Cuando el bisabuelo de Guillermo Ramos fundó el negocio solo había otra fábrica de mantecados en la localidad, La Castaña, «que desapareció hace algunos años», matiza Ramos. Sin embargo, en época de su abuelo Juan, la industria había crecido considerablemente y por los años 40 «había bastantes fábricas e incluso una Unión de Fabricantes que negociaba con los ministerios pertinentes los temas del azúcar, la harina y otras materias primas para elaborar los mantecados». «Había entre 20 y 25 fábricas y éramos referentes a nivel de producción, mucho más de lo que hoy puede ser Estepa», apunta Guillermo Ramos.

Avilés montó su fábrica para aprovechar la materia prima que tenía en sus economatos «donde vendía preparos para las matanzas». «El mantecado ha sido siempre muy estacional, llegaba con el frío y las matanzas y cuando pasaba la Navidad se acababa», explica Guillermo. Sin embargo, los de La Antequerana conseguían llegar muy lejos en ese breve periodo de tiempo gracias al ferrocarril. Se elaboraban en el obrador de la calle Merecillas 16, que durante la etapa de los padres de Guillermo tuvo dos grandes ampliaciones al incorporar dos viviendas de la calle la Vega. La etapa previa, la del abuelo de Guillermo fue quizá la más difícil, ya que había que conseguir materias primas en tiempos que escaseaban y, pese a eso, los mantecados de La Antequerana no dejaron de hacerse nunca.

A la muerte de Juan Pérez de Guzmán, y con solo 19 años, la madre de Guillermo se hizo junto a su marido con los mandos de la fábrica. Además de ampliar el obrador, los padres de Guillermo aumentaron la mecanización del proceso. Ya su abuelo Juan usaba un molde que él mismo inventó, mientras sus padres introdujeron la máquina para cortar los mantecados, afirma Ramos.

Sin embargo ha sido con esta cuarta generación cuando la fábrica más se ha mecanizado. Guillermo, que entre juegos y estudios echaba «una manilla», a los 20 años ya estaba incorporado de lleno en la parte de producción. «Me han gustado mucho los procesos industriales y siempre he buscado la manera de generar más producción con menos esfuerzo», admite. Con la mecanización, La Antequerana creció más y más y Ramos, que se puso al frente de la empresa en 1997, decidió en 2004 crear una nueva fábrica en el Parque Empresarial de Antequera, donde se mudaron finalmente en 2008, aunque mantienen como punto de venta el antiguo obrador de la calle Merecillas.

100.000 kilos al año

La Antequerana, que emplea a 25 personas en plena campaña -principalmente a mujeres-, produce hoy 100.000 kilos de mantecados al año. «A partir del centenario, que fue en 1988, fuimos ascendiendo bastante en la línea de producción. En los 80 hacíamos unos 30.000 kilos y ahora hacemos 100.000 y muchas más especialidades que antes», apunta Guillermo. Hoy los mantecados de La Antequerana llegan a todo el territorio nacional, aunque gracias a pedidos de particulares a través de su página web los han probado hasta en Japón o Argentina.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur Mantecados con un siglo de historia