Sabores italianos en Málaga
Pequeña guía de locales que nos transportarán a Italia sin movernos de la provincia
Si la cocina francesa ha dictado desde el siglo XVIII los cánones de la alta restauración, la italiana tardó mucho menos tiempo en conquistar los ... paladares de América, Europa, parte de África, Asia y Oceanía, hasta el punto de ser adoptada como extensión de la culinaria nacional en muchos países. Se le atribuye a Juan Mari Arzak el razonamiento de que ese éxito radica en que la cocina italiana se construye sobre tres ingredientes fáciles de conseguir en cualquier parte del mundo: harina de trigo, tomate y queso. En todo caso, el maestro vasco advertía en 2003 en 'Euskonews': «La cocina viaja, es cierto, pero es algo muy complicado». No le falta razón. Hace tiempo que los pobres italianos se resignaron a ver etiquetadas como italianas recetas que en nada se identifican con la magistral sencillez de la auténtica.
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El boom de la rústica, maternal y sabrosa comida italiana en Occidente se produjo con la gran emigración italiana a América. Entre 1860 y 1970 llegaron a Argentina tres millones de italianos, y entre 1890 y 1978, Estados Unidos había recibido 5,5 millones. Ambas cocinas nacionales quedaron impregnadas de herencias italianas. En España no hubo emigración masiva, y a pesar de que recetarios como 'El practicón' de Ángel Muro (1894) incluyeran recetas de pasta, los primeros restaurantes italianos no abrieron hasta mediados del siglo XX. A Málaga llegaron por la costa, como tantas cosas. O Mamma Mia, del carismático y visionario Sergio Bracci, inauguró en 1972 en Fuengirola. Al final de la década ya tenía sucursales en La Carihuela y Málaga capital. Sigue gozando de muy buena salud (https://www.omammamia.com/) y tiene varias franquicias en España.
En Málaga capital también fue pionera Trastevere, fundada en 1978. Ambas casas figuran entre las pizzerías más antiguas del país. Hoy, Tripadvisor contabiliza 190 restaurantes italianos solo en Málaga capital, y todos tienen algo que mantiene fiel a su clientela, así que el intento de hacer una pequeña guía de restaurantes y tiendas de productos italianos hay que iniciarla pidiendo disculpas de antemano por olvidos u omisiones que puedan molestar a alguien. No obstante, hemos pedido ayuda para elaborar nuestra lista a residentes italianos relacionados con la gastronomía, a periodistas gastronómicos como Enrique Bellver, crítico de esta casa; Paloma Almansa (http://gastronewsonline.com/), Lutz Petry (www.guiagastronomicacds.com/), Manu Balanzino (https://www.thegourmetjournal.com/), y a grandes 'restaurant trotters' como Stephen Kendall (https://www.churchill1795.com/).
Empecemos por distinguir tipos de restaurante. En España una pizzería puede aludir a un restaurante italiano generalista. La 'trattoria' es un restaurante de cocina casera o tradicional, la 'osteria' es un tipo de taberna que puede tener una oferta sencilla de trattoria y por lo general no sirve pizzas. Algunos de los restaurantes italianos más singulares de la capital eligen esa denominación. Como Mura Mura (C/ Duque de la Victoria, 5, Málaga, tel. 602 524 103), donde Carmine Guarino es capaz de emocionar con una pasta al ragú al estilo de su Campania natal y sorprender con platos de autor que revisan esa tradición sin perder de vista el sabor. Eso y su compromiso con pequeños productores italianos y locales hacen imprescindible la visita. También en Málaga destaca Osteria Angelino (https://osteriaangelino.es/), donde Daniele Orieti borda especialidades romanas y pastas artesanas, y sorprende con bocados como sus 'caramelos' de queso ahumado y panceta. Radici (C/ Ramón Franquelo, 2, 685 602 382) basa sus excelentes valoraciones en redes sociales en una carta donde mandan las pastas y especialidades napolitanas, incluidos los postres. La Casa de la Pasta (https://casadelapasta.com/), en El Palo, lleva más de medio siglo ofreciendo buenas pastas caseras, además de otros platos.
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Pese a no ser muy compleja, en la cocina italiana el producto y un tratamiento destinado a hacerlo brillar marcan la diferencia. Matteo Manzato ha dirigido esa cultura de respeto a la materia prima hacia la de su tierra de acogida, logrando que Venetiis Restaurant (https://venetiisrestaurant.com, Benalmádena) se convierta en un ejemplo único de cocina de fusión italo-malagueña. Junto a clásicos como su lasaña crujiente, el lomo de chivo lechal con avellanas y vino tinto es una delicadeza. Para Enrique Bellver, «de lo más interesante del momento». Una cocina de autor muy sólida escoltada por una estupenda sala, un espacio encantador y una bodega cuidada.
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Pistas para los muy pizzeros
Bruno Filippone, fundador del grupo Da Bruno de Marbella (https://www.mundodabruno.com/), elabora su propio vino blanco con uva vermentino que ha plantado en Manilva en un proyecto pionero de viticultura. El vino se llama Döss y es muy notable. Se puede comprar en la tienda de Da Bruno Cabopino, que también vende productos que importa de Italia. Además, cultiva verduras italianas, que destacan en una carta con calidad en pizzas, pastas y termines.
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La costa fue el lugar por donde entraron los primeros restaurantes italianos y hoy muchos cumplen estándares de excelencia. El chef Andrea Tumbarello regenta una sucursal de su famoso Don Giovanni de Madrid en el hotel Finca Cortesín (www.fincacortesin.com) de Casares. Merece la pena por la comida y por la exquisita puesta en escena. Cierra en temporada baja.
En las callejuelas del casco histórico de Marbella destila encanto Stuzzikini (https://stuzzikini.com/). Su cocina actual y refinada incluye también especialidades tradicionales de Cerdeña como la fregola sarda, bolitas de sémola tostada con almejas, azafrán, vino blanco, tomatitos y un toque picante. Enrique Bellver destaca también L'Impronta (www.trattoria-limpronta.com/), un local con decoración exquisita donde el chef Francisco Vargas rinde homenaje a la gran cocina italiana de Paolo Ghirelli (La Meridiana). La caponata con burrata o las pastas rellenas son imperdibles. Bellver añade a sus recomendaciones La Pappardella de Banús (https://www.lapappardella.com/) y Noto (http://notorestaurant.com/), y Trattoria Il Mare, en Gran Hotel Guadalpín Banús.
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Sin lujos pero con una oferta basada en buena cocina tradicional, excelentes pastas y pizzas al estilo napolitano, para tomar in situ o para disfrutar en casa, Il Pasticcio Marbella (https://pasticciomarbella.es/) arrasa literalmente con las valoraciones en redes sociales. Líder en Tripadvisor, 4,9 en Google Maps... Productos frescos, flexibilidad de formatos y buena relación calidad-precio son sus fuertes.
Otros restaurantes que nuestros expertos destacan en la Costa del Sol occidental son Mia's, en Fuengirola (https://miaspizzorante.com/), que aunque se anuncie como 'pizzorante' borda las carnes, otra gran especialidad de la cocina italiana. Aquí se puede degustar un auténtico vitello tonato y una excelente tagliata (entrecot) a la romana. En La Pala D'Oro (https://lapaladoro.com/), con sede en Benalmádena y local también en Málaga, Manu Balanzino recomienda probar los spaghetti 'al bronzo', especialidad que se sirve con diversas salsas, desde una carbonara a una suculenta combinación con guanciale, huevo, parmesano y pimienta. Y de nuevo en Málaga, Vittoria (https://pizzeriaitalianavittoria.com/) también sirve pizzas, pero Manu Balanzino destaca su destreza para las pastas.
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