El ministro de Transportes anuncia que se retomará el anillo ferroviario de pruebas en Antequera
Esta iniciativa quedó aparcada hace una década, después de la fuerte oposición de los propietarios de las fincas
El segundo anuncio de Óscar Puente en el foro organizado por SUR ayer fue una verdadera sorpresa para todos los asistentes. Y es que el ... ministro de Transportes hizo patente de manera totalmente inesperada su intención de retomar el antiguo proyecto del circuito de pruebas para homologar trenes en Antequera.
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Esta iniciativa quedó aparcada hace una década, después de la fuerte oposición de los propietarios de las fincas, sobre todo de olivares que iban a resultar afectados. Así como por problemas presupuestarios y por la falta de inversores privados, entre otras cuestiones. Sin embargo, ahora se ha comprobado que la inexistencia en España de una infraestructura de este tipo lastra el desarrollo de la movilidad en tren.
«El sistema ferroviario está cada vez más tensionado, nos faltan trenes y cuando llegan, tardamos mucho en homologarlos. Tenemos que ponerle remedio, y una forma de hacerlo es tener de una vez por todas un circuito de pruebas que nos permita homologar los trenes mucho más rápido».
Cabe recordar que, a día de hoy, para dar luz verde al material nuevo que se fabrica hay que utilizar las vías convencionales, de pasajeros y mercancías, en determinados tramos. En cambio, el uso diario tiene la prioridad, por lo que sólo se pueden aprovechar los huecos (surcos) que deja Adif en algunos días y horas. Ello hace que se pierda mucho tiempo y prolonga meses la puesta en marcha de los nuevos convoyes.
¿Nuevo anillo ferroviario?
Por ello, el ministro ha recordado el circuito de pruebas que se diseñó en la zona de Antequera, que tenía el propósito de paliar ese problema. «Ese proyecto cayó en el olvido y les anuncio que lo vamos a retomar donde estaba, en la provincia de Málaga», sentenció Puente. «Cuando esté concluido, permitirá que España sea junto con China el único país donde se va a poder homologar un tren en muy poco tiempo, en un entorno real y con una inversión importante. La provincia se beneficiará de la inversión y de los puestos de trabajo que se generen durante su construcción y en la actividad del circuito». Fuentes ministeriales aclararon poco después que, de momento, es sólo una declaración de voluntad política, pero todavía no hay estudios al respecto, que se irán dando a conocer conforme avancen.
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El proyecto que se quedó en un cajón en 2016 constaba de dos circuitos: un anillo principal, de vía única de ancho estándar o internacional (para alta velocidad) de unos 58 km, con una recta de 9 km y curvas de radio amplio. Iba a servir para probar los trenes a velocidades máximas de hasta 450 km/h homologables (puntas de 520 km/h). También se dibujó entonces un anillo secundario de 20 km, para pruebas de material de altas prestaciones (hasta 220 km/h) con ancho mixto (UIC e ibérico). La inversión prevista rondaba los 400 millones e iba a generar unos 7.000 empleos. De todo aquello sólo quedó la nave de talleres, que se mantiene sin uso desde entonces.
Para el alcalde de Antequera, Manuel Barón, la clave está en la ubicación del circuito. «Se puede aprovechar el entorno del Puerto Seco y estaría pegado a la nave de Adif; en ese punto podría ser positivo y complementario, porque desde el Ayuntamiento no nos negamos a las inversiones». Aunque advirtió: «Si la idea es hacerlo igual que el proyecto de 2010, en plena Vega de Antequera, nuestra oposición es frontal». «Hay que ser inteligentes para aprovechar los recursos, se puede circunvalar el Puerto Seco donde ya hay suelo expropiado, pero no expropiar más terrenos de la Vega, que es una zona agrícola y medioambiental muy potente».
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La propuesta tampoco ha gustado nada a la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja). «Si el proyecto que ya fue rechazado hace una década vuelve a plantearse, Asaja Málaga volverá a oponerse con la misma firmeza y determinación», afirmó su secretario general, Santiago Sánchez. «Este proyecto fue paralizado en su momento gracias a la presión social, institucional y técnica ejercida por esta organización, con el respaldo de cientos de agricultores afectados».
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