Genio matemático en las venas

Y, cosas del azar o de la genética, 32 años después Gonzalo Carrasco hijo ha seguido los pasos de su padre, e incluso le ha superado: ha llegado a la fase nacional, de la que se ha traído una medalla de bronce. Pero el mérito del joven no ha quedado ahí: también se ha presentado a la Olimpiada de Física, en la que ha conseguido una mención de honor.

Gonzalo Carrasco Vergara estudiaba entonces octavo de EGB (equivalente al actual segundo curso de la ESO) en el colegio El Romeral. Recuerda que su profesor reclutó a algunos alumnos para prepararlos en aquella incipiente competición matemática. El primer premio lo compartió con una niña del colegio Maravillas. Los cinco primeros clasificados participaron en la fase regional. «Recuerdo que fuimos a Almonte, con 40 jóvenes de toda Andalucía. Es un bonito recuerdo, para mí fue el primer viaje solo fuera de casa, convivimos chicos y chicas de distintas provincias e institutos», señala Gonzalo padre.

Gonzalo Carrasco Marqués acaba de terminar segundo de Bachillerato en el colegio Maristas de Málaga. La Secundaria la estudió en Madre Asunción. Su profesor de Matemáticas le animó a presentarse a la olimpiada, sin saber que su padre había sido uno de los ganadores, años atrás. Se clasificó para el regional, que se celebró en La Rábida. Dos chicos, uno de San Pedro y él, acudieron en marzo a la fase nacional, que se celebró en Orense, donde consiguieron plata y bronce, respectivamente. Pero no satisfecho con las matemáticas, también se ha atrevido con Física. La final se celebró en Salamanca, y aquí ha recibido una mención de honor.

Con 17 años está a un paso de entrar en la universidad. De los exámenes de selectividad ha salido «muy contento». Y con estas acreditadas habilidades en Matemáticas y Física, la pregunta sobre qué quiere estudiar parece innecesaria: «el doble grado en Física y Matemáticas, en Granada», fue la previsible respuesta del joven. En el tema profesional el hijo toma un camino diferente al padre. Santiago Carrasco Vergara estudió Derecho y Económicas. A las universidades públicas no habían llegado los actuales dobles grados, pero en ICADE de Madrid pudo hacer las dos carreras en seis años. Ha ejercido muchos años como economista, y desde el año pasado también se dedica a la abogacía.

Gonzalo hijo sabe que estará difícil llegar a la nota que se exige en este doble grado, una de las carreras de moda, pero él lo ha intentado: en primero de Bachillerato tenía todo sobresaliente, y en segundo el francés, con un notable, le ha impedido hacer de nuevo pleno de la máxima nota.

De estas experiencias, Gonzalo Casrrasco Marqués valora, más que las medallas o menciones, los momentos vividos, lo aprendido en convivencia y las amistades que han forjado. «No nos veíamos como rivales, la competición nos ha servicio para hacer muy buenas amistades», dice el joven.