Suicidios, infartos y caídas accidentales, entre las causas de muerte que más crecen en Málaga

Gracias a la estadística publicada por el INE, hoy se puede saber por qué la mortalidad se disparó en 2021. Y no fue por una sola causa, sino por varias. La más evidente es el Covid, que se llevó por delante la vida de 1.410 malagueños: concretamente 1.397 con virus confirmado, 11 con sospecha no confirmada y dos por «síndrome inflamatorio multisistémico asociado a Covid-19», que es un epígrafe nuevo introducida en 2021. Son 384 muertes más de las que se achacaron a esta enfermedad en 2020, un 37,4% más en términos porcentuales.

Las enfermedades del sistema circulatorio fueron, con diferencia, la causa más frecuente de muerte en Málaga, con 4.282 fallecimientos. Ya lo eran, pero en 2021 incrementaron su letalidad un 3,9% respecto a 2020. Lo más llamativo es el incremento del 11,7% respecto al año prepandemia, 2019. Dentro de este gran grupo de patologías, destaca el aumento de mortalidad asociada a las enfermedades hipertensivas (con 553 muertes, un 14,5% más que en 2020 y un 54,5% más que en 2019) y a los infartos agudos de miocardio (con 502 muertes, un 10,1 más que en 2020 y un 32,4% más que en 2019). El capítulo de «otras enfermedades del corazón» (que engloba desde pericarditis, miocarditis y endocarditis a trastornos de las válvulas, entre otros) engloba 886 fallecimientos, un 15,1% más que el año anterior y un 18,3% más que en 2019. En cambio, disminuyó respecto a 2020 un 4,4% la mortalidad asociada a los accidentes cerebrovasculares, que no obstante sigue siendo la principal causa dentro de las enfermedades circulatorias, con 940 fallecidos.

El cáncer, la segunda causa de muerte más importante entre los malagueños, prosiguió su lento pero inexorable crecimiento, aunque a diferencia de las enfermedades del corazón ya citadas, no protagonizó un aumento tan intenso de mortalidad. Un total de 3.551 personas sucumbieron al cáncer en la provincia en 2021, un 2,9% más que en 2020 y un 5,4% más que en 2019. Los tipos de tumores más letales fueron el de pulmón (con 730 muertes, un 2,4% más que el año anterior), el de colon (332 muertes, un 3,8% menos), páncreas (con 246 fallecimientos, un 32,3% más), el de próstata (con 221 muertes, un 46,4% más) y el de mama (con 218 defunciones, un 3,5% menos). Como se ve, hay ciertos tipos de tumores (los de próstata y páncreas) que sí dispararon su mortalidad en 2021, un año en el que hay quienes defienden que se pagaron las consecuencias del retraso en el diagnóstico del cáncer por el colapso sanitario derivado del Covid.

Otra consecuencia de la pandemia, en este caso positiva, fue la sustancial reducción de muertes asociadas a enfermedades respiratorias que no son Covid. Este grupo de patologías, que en 2019 se llevaron a la tumba a 1.237 malagueños y en 2020 a 1.108, disminuyeron su mortalidad un 9,7% en 2021, quedando la cifra de defunciones situada en 1.000. Una tendencia que parece claramente relacionada con el uso de la mascarilla y la menor circulación de virus respiratorios. Así, el año pasado solamente fallecieron dos personas por gripe en la provincia, frente a las 29 de 2020 o las 28 de 2019. Las muertes por neumonía no asociada al coronavirus también se redujeron un 28% respecto a 2020 y un 36,4% respecto a 2019.

Las causas no naturales, desde el suicidio a los accidentes o los asesinatos, se llevaron la vida de 536 malagueños el año pasado, un 7,4% más que en 2020. Este incremento podría achacarse al confinamiento y las restricciones de movilidad que había ese año, que, por ejemplo, explicarían la disminución de accidentes laborales o de tráfico. Pero hay un dato que contraviene esta teoría: las muertes no naturales también aumentan (nada menos que un 20,2%) en relación a 2019.

Así, los datos dan la razón a quienes vienen alertando de la epidemia silenciosa de suicidios que se ha desatado a raíz del Covid. El año pasado se quitaron la vida 187 personas en Málaga, un 14,7% más que en 2020 y un 53,3% más que en el año previo al Covid. Es un récord histórico que se produjo también a nivel nacional, con más de 4.000 fallecidos. Es una tragedia que afecta a casi tres veces más hombres que mujeres: 137 varones se suicidaron, frente a 50 féminas.

Hay, en fin, otros incrementos de mortalidad cuya causa parece más misteriosa. Por ejemplo, las caídas accidentales: en 2021 murieron por esta causa 130 malagueños, cerca del doble que en los dos años anteriores. Dentro de este capítulo se engloban tanto accidentes domésticos como laborales u otros registrados en establecimientos de ocio o parajes naturales. Los accidentes de tráfico provocaron 49 defunciones, en línea con años anteriores. Hubo que lamentar 64 ahogamientos (más que en 2020 pero menos que en 2019), 33 sobredosis de droga (cifra similar a la de años anteriores) y 15 homicidios (el doble que el año anterior, pero menos que en 2019).

La mortalidad asociada al alzhéimer se mantuvo en línea con los últimos años, con 541 fallecidos en la provincia. Otras demencias asociadas a la vejez pero diferentes al alzhéimer provocaron una cifra cercana de defunciones (511).