Vélez-Málaga lanza un programa para combatir la soledad de mayores y dependientes

González explicó que este proyecto pionero tiene como objetivo combatir la soledad no deseada, favorecer la promoción del envejecimiento activo, mejorar la calidad de vida y el bienestar mental de los mayores y personas dependientes. El proyecto incluye además la prestación de un servicio para realizar pequeñas reparaciones en el hogar dirigido a personas en situación de dependencia o vulnerabilidad.

González destacó que «el 39,8% de las personas mayores de 65 años presentan soledad emocional, en España se estima que más de 2,5 millones de ancianos se sienten solos, constituyendo casi el 40% de los mayores de 65 años, una situación que a nivel psicológico, provoca soledad, depresión, tristeza y ansiedad, asimismo a nivel fisiológico provoca enfermedades coronarias y vasculares». «Detrás de estas cifras y estos datos están las personas, ciudadanos de Vélez-Málaga y el Ayuntamiento, como administración local, tiene que estar a su lado más que nunca», manifestó el edil.

Por su parte, Cobo explicó que Coolaboro es un centro especial de empleo con una trayectoria de 18 años realizando su labor en Madrid y cuatro años en la provincia de Málaga, un modelo de integración laboral para personas con discapacidad orientadas a la profesionalidad y la calidad de los trabajos que realizan. «Las personas con discapacidad, como cualquier otra persona, tienen sus limitaciones y sus habilidades, por ello asignamos a nuestros trabajadores un puesto de trabajo en el que sus limitaciones no le impidan desarrollar las tareas que tienen que desarrollar», afirmó. «Hemos empoderado ya a más de 700 personas, en este caso desde nuestro centro se pondrán a disposición psicólogos y trabajadores sociales que realizarán acompañamiento telefónico y presencial, ayudándoles además en gestiones cotidianas», añadió Cobo.

El proyecto se dividirá en tres fases durante diez meses. En una primera fase se realizarán encuestas telefónicas, de las cuales se obtendrán las personas usuarias que están en riesgo y cumplan los requisitos para formar parte del programa. En una segunda fase se llevará a cabo un seguimiento telefónico quincenal y se realizará el acompañamiento a personas mediante visitas mensuales, manteniendo una escucha activa para detectar posibles situaciones que puedan derivarse a otros profesionales del centro de Servicios Sociales Comunitarios, una acción que potenciará la red de apoyo digital entre el vecindario y los servicios de proximidad. Por último, se emitirán informes finales y memorias de actividades realizadas de cada caso particular, pudiendo ser derivados a otros servicios y ofrecerles recomendaciones concretas a las personas usuarias.

Del mismo modo, se ofrecerá un servicio de pequeñas reparaciones en el hogar para solventar las carencias y defectos básicos en los hogares, facilitar la realización de una vida independiente y autónoma para mejorar la calidad de vida de los mayores que pertenezcan al programa. El personal del centro de Servicios Sociales Comunitarios será el encargado de detectar las necesidades y realizar los trámites pertinentes para acometer esas reparaciones, siempre que sea factible. Además se incluirán los materiales necesarios para las reparaciones.