Quejas en Vélez-Málaga por un coche fúnebre con un ataúd vacío aparcado en la calle desde hace un mes
La Policía Local asegura que no puede hacer nada para retirarlo porque no incumple ninguna normativa
La realidad supera a menudo la ficción. La situación que se está viviendo en una céntrica calle de Vélez-Málaga desde hace un mes ... es más propia del mejor guion de una película de Berlanga. Una vecina se ha comprado un coche fúnebre de segunda mano, con un ataúd incluido, eso sí, vacío, y lo tiene aparcado en su puerta.
La situación está generando un gran revuelo en la calle La Música, ya que al menos media docena de residentes se han quejado al Ayuntamiento de la capital de la Axarquía, alegando que no les gusta que ese vehículo funerario esté allí aparcado, delante de sus puertas, y tener que verlo cada día.
La Policía Local ha acudido ya en varias ocasiones. La primera vez, comprobaron que el coche tenía la ITV caducada, pero la propietaria ha subsanado esta deficiencia, por lo que fuentes policiales han informado a SUR de que no pueden hacer nada, porque no incumple ninguna normativa municipal de tráfico.
Los vecinos se quejan de que les «da mal rollo» que haya un coche funerario aparcado en sus puertas, a pesar de que el ataúd no se ve desde fuera, ya que los cristales tienen unas cortinillas de color gris que lo tapan. A pesar de ello, los residentes han expresado que les «da ansiedad», ya que «hay personas mayores que están enfermas en la zona».
«Artista perfomance' audiovisual»
El polémico vehículo es un Renault 21 que perteneció a una funeraria. La propietaria, con la que ha podido hablar SUR este sábado, ha dicho que se lo compró hace un mes con la idea de que sea su vehículo particular. «Es un coche más, no sé dónde está el problema», ha expresado esta mujer, que ha declinado posar para este periódico ni que se publique su nombre. Preguntada por la presencia de un ataúd en su interior, ha manifestado que «lógicamente está vacío».
«Soy artista 'perfomance' audiovisual, me lo regaló mi novio el pasado Día de los Enamorados, el 14 de febrero, para rodar cortometrajes», ha manifestado la mujer, quien no descarta utilizarlo también «para ir a comprar al Mercadona». Aunque aún no ha grabado ninguna pieza audiovisual, que pretende publicar a través de sus redes sociales, ha asegurado que está estudiando un ciclo formativo de grado superior de caracterización y maquillaje.
La vecina ha confesado que las quejas de los residentes de la calle le están «afectando mucho a su salud». De hecho, cuando este periódico ha llamado a su puerta, ha manifestado que «pensaba que era otra vez la Policía Local». «Han venido ya varias veces, pero no estoy incumpliendo ninguna normativa», ha dicho la dueña del coche fúnebre. «Voy a ponerle unas coronas de flores, solo por fastidiar a los vecinos», ha desvelado. El conflicto vecinal amenaza con agudizarse. Veremos.
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