El mango se saborea en licor

Los hermanos José Manuel, Ana Belén y Javier Arrebola Vivas, de 35, 34 y 33 años, respectivamente, se han criado viendo en sus casas cómo sus padres y abuelos elaboraban el resolí, una bebida típica de Alfarnate a base de licor, café, canela, clavo y agua. «Se tomaba en invierno, para combatir las bajas temperaturas», recuerda el mayor de los hermanos. En diciembre de 2013, con motivo de un mercado artesanal organizado por el Ayuntamiento, se decidieron a poner a la venta varias botellas. El éxito fue tal que se plantearon empezar a comercializarlo a una mayor escala.

A punto de cumplir sus dos primeros años, De la Abuela, la empresa creada por estos tres jóvenes, ha conseguido colocar ya en el mercado más de 4.000 botellas de resolí. Pero es que además el espíritu innovador de los Arrebola Vivas les ha llevado a elaborar nuevos licores, de membrillo, frambuesa, cereza y hasta mango. Con este último se han convertido en la primera firma del país y «creemos que del mundo» que elabora un licor de esta fruta subtropical, que se cultiva cada vez más en los campos de las zonas más bajas de la comarca de la Axarquía.

«Hemos hecho una primera tirada, con apenas 20 botellas, que presentamos en la feria Sabor a Málaga celebrada en Antequera. Fue un éxito absoluto, y ya estamos preparándonos para elaborar al menos 200 botellas, justo ahora cuando comience la campaña del mango local», explica José Manuel, quien destaca que han tenido la posibilidad de preparar el licor con mangos de importación, «pero no saben igual que los de aquí», matiza.

De cara al próximo año, los responsables de De la Abuela confían en seguir aumentando los puntos de venta, que superan ya la veintena, tanto en la provincia como en Madrid, Guadalajara, Barcelona y la capital malagueña. En total, esperan elaborar cerca de 3.000 botellas de licores, sumando las cinco variedades. Todas tienen medio litro y se venden a entre seis y siete euros.