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MARI CARMEN JAIME
Domingo, 16 de marzo 2014, 02:40
En menos de una hora sin mirar su móvil José Antonio Guerra, más conocido como Antonio Moyano, tenía 16 llamadas perdidas, algo normal para un lotero que había repartido en unas horas millones de euros en Fuengirola. Y es que, el primer premio del sorteo de la Lotería Nacional celebrado ayer, el 57.513, se ha vendido casi íntegramente en la localidad costasoleña.
La administración número 4 de la ciudad, que vende este boleto desde su apertura hace 27 años, ha sido la encargada de vender 96 de los 100 décimos que forman el número, dotados con 60.000 euros, además de un especial a la serie y el fraccionamiento, que hace ganador a su propietario de tres millones de euros. Así, Cristina Díaz, hija del propietario de la administración, calcula que, en total han repartido «más de 8,7 millones de euros, la mayoría se ha vendido a vecinos y gente conocida de Fuengirola, de modo que la felicidad es más grande aún», asegura.
Moyano, que pese a ser sábado y haber vendido 24 décimos premiados -entre ellos el especial- seguía en la tarde de ayer trabajando como cualquier otro día, aunque con una felicidad que no podía contener. Resalta que el premio de mayor cuantía «ha caído muy bien, a una familia que realmente lo necesitaba». No es la primera vez que el vendedor reparte suerte en la localidad. Hace menos de un año entregó también un buen pellizco de otra administración para la que trabaja y a mediados de los ochenta se estrenó en eso de hacer feliz a los demás. Tampoco están de estreno en la administración Nuestra Señora del Rosario, que vendieron otro gordo poco antes del año 2000.
Las historias relacionadas con este número, convertido en un clásico en la ciudad desde hace años «ya que se vende de forma íntegra en el municipio desde hace décadas, hasta el punto que ya ni se pone en ventanilla», no dejaban de acontecer en el entorno de la administración, ubicada en calle Miguel de Cervantes, en pleno centro de la localidad. Hasta allí se acercaron afortunados como Antonio Gómez, del restaurante Palangreros, a quien la suerte le ha sonreído con un boleto premiado 60.000 euros, «correspondiente a un número que llevo comprando desde hace más de veinte años». Entusiasmado y casi sin creerlo, contaba a los propietarios y vendedores que se había enterado «de casualidad, porque un compañero de trabajo le avisó para que comprobase su premio». Así, admite aún nervioso que la primera vez que comprobó el premio en Internet «ni siquiera aparecía». En su caso, adelanta que destinará parte del premio «a viajar y disfrutar».
En estos momentos de alegría también hay recuerdos tristes. Moyano comenta en la administración el caso de un amigo que «justo hace una semana dejó de comprar el número, tras años detrás de él y le dije que en cuanto dejase de buscarlo le tocaba. Así es la suerte». La suerte llegó también a otros municipios de España. En el sorteo, el segundo premio, dotado con 120.000 euros, fue para el 12.565, consignado en la administraciones de loterías número 5 de Castelldefels en Barcelona, 1 de Móstoles en Madrid y 56, también de la Capital. Los reintegros son para los números acabados en 3, 0 y 5.
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