Marín asegura que el PGOU no contempla el derribo de las 89 viviendas de Infanta Elena

La Ciudad Autónoma va a explicar a lo largo de esta semana a la ciudadanía, las asociaciones, los colegios profesionales y la Administración General del Estado el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que, desde el pasado 1 de junio, se encuentra en periodo de exposición pública. Entre las novedades destaca la construcción de dos zonas de aparcamiento en el barrio del Industrial, el proyecto para el Callejón de la Marina, los planes especiales que se llevarán a cabo en los cuartes de Santiago y Gabriel de Morales y la protección de 89 edificios de gran valor patrimonial. Además, y para evitar especulaciones, Miguel Marín avanzó ayer que no se prevé la demolición de la urbanización Infanta Elena en El Real.

Ayer por la tarde, hoy y mañana la Consejería de Fomento se va a encargar de explicar pormenorizadamente a los melillenses los entresijos del nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que sustituye al aprobado en 1995. Del vigente plan se ha desarrollado un 60 por ciento, se han llevado a cabo 14 modificaciones puntuales, se han desarrollado ocho sectores y ha habido 23 actuaciones urbanísticas. El nuevo PGOU prevé la construcción de 7.970 viviendas, lo que supone que Melilla tendrá capacidad para albergar a más de 110.000 habitantes.

A la hora de elaborar el plan se han recogido tres tipos de suelo, urbano, urbanizable y no urbanizable y se han establecido dos alternativas posibles para cada actuación. Así, en el caso del proyecto del Callejón de la Marina finalmente se ha optado por una iniciativa que conjuga tanto su urbanización como la creación de una gran zona verde. Por lo que respecta a las cifras, Marín detalló que el suelo urbano y urbanizable ha aumentado tan sólo un dos por ciento «para no hipotecar el suelo de la ciudad para las próximas generaciones», las zonas verdes un 63 por ciento, el equipamiento un 77 por ciento y el suelo industrial un 73 por ciento.

El nuevo plan incluye también una ficha con las actuales zonas de aparcamiento y las que se construirán en un futuro, como las previstas para el Álvarez Claro, la Espiguera, el Industrial o Alfonso XIII. En cuanto a las actuaciones recogidas en suelo urbano destacan las que se llevarán a cabo en barrios como Cabrerizas, Reina Regente y la Libertad para dotarlos de más equipamiento, los planes especiales para Gabriel de Morales y Santiago, el cinturón verde que se creará a lo largo del Río de Oro o las iniciativas previstas para la Cuesta de la Viña y las calles Japón y Cataluña, entre otras.

Los antiguos depósitos de agua de Cabrerizas se destinarán a equipamiento deportivo, una zona que se conectará con el Polvorín a través de una carretera que ya cuenta con el visto bueno inicial del Ministerio de Defensa. Por lo que respecta a los planes especiales de Santiago y Gabriel de Morales, que se aprobarán en breve, Marín indicó que incluyen, además de viviendas, la construcción de un colegio y un instituto y un gran parque de más de 20.000 metros cuadrados. Otra zona deteriorada en la que se prevén espacios verdes y de ocio será Cabrerizas.

Para evitar posibles rumores, el consejero de Fomento adelantó que el nuevo plan no incluye la demolición de las 89 viviendas de Infanta Elena, en el barrio de El Real. Lo que si se contempla, dijo el popular, es que en un futuro, y siempre y cuando los vecinos estén de acuerdo, se trasladen a otras viviendas construidas por la Ciudad en esa zona para crear en ese espacio un bulevar y un aparcamiento subterráneo.

Entre las novedades del nuevo PGOU destacan las zonas de vigilancia arqueológica, para conservar zonas de posibles yacimientos, y el catálogo de edificios protegidos con un total de 89 inmuebles, 20 de ellos con protección integral y 69 parcial o ambiental. En cuanto a la inversión que se prevé conllevará el desarrollo del nuevo Plan General de Ordenación Urbana, el consejero de Fomento señaló que asciende a 184,8 millones de euros, una cantidad que se reparte entre la Ciudad Autónoma (58 millones), otras administraciones (71 millones) y privados (55 millones).

Según Marín, el nuevo Plan General de Ordenación Urbana evitará la especulación urbanística y aumentará la calidad de vida de los melillenses, ya que contarán con más espacios verdes y de ocio.